ERC afirma en público que no renuncia a la "unilateralidad", pero opta por omitir este término en la redacción de la ponencia que su militancia votará este sábado en el 28º congreso del partido. Se trata de un giro relevante respecto a su ponencia vigente, la de julio de 2018, que sí que hablaba explícitamente de la vía unilateral y la declaración de independencia del 27 de octubre de 2017.
La dirección del partido trata de hacer equilibrios para lograr el apoyo de las bases, reticentes a abandonar “el legado político del 1-O”, y al mismo tiempo avanzar en las negociaciones con el PSOE de cara a abstenerse en la investidura a cambio de un pacto en la Generalitat, si finalmente se anticipan las elecciones en la región.
“Ho tornarem a fer”
Las bases, por el momento, son prudentes con el documento y afirman en conversación con este medio que “los redactores de la Ponencia” han aceptado la gran mayoría de las enmiendas presentadas, que han sido cerca de un millar.
El hecho de que no aparezca la controvertida palabra no les preocupa en exceso, ya que se mantienen expresiones como “ho tornarem a fer” (lo volveremos a hacer) y tampoco se excluyen afirmaciones como que no renuncian a “ninguna vía democrática” para lograr su objetivo político. “Nos gustaría que estuviera explicado de una forma más explícita y diáfana, pero ya aparece cuando se dice que lo volveremos a hacer sin permiso del Estado. Eso es unilateral sí o sí”, explican fuentes de las bases.
¿Y después del congreso?
El sábado llegará al plenario el documento junto a todas las enmiendas que la dirección ha ido aceptando o transaccionando. Aquellas que no hayan logrado el acuerdo entre cúpula y base deberán someterse a votación durante la celebración del congreso. De lo que se apruebe el sábado en el Centro de Convenciones del Fòrum en Barcelona, al que asistirán 1.700 afiliados, saldrá la nueva ponencia política de ERC.
En el aire está constatar la finalidad final de la omisión de la palabra. Si sirve para allanar el terreno al acuerdo con el PSOE y Podemos pero sin renunciar de facto a recuperar esa vía, o es una forma de contentar a las bases para que no sean un obstáculo en los intereses de la dirección.