Los separatistas le preparan una recepción 'especial' al Rey en su regreso a Cataluña. Carles Puigdemont le ha dado instrucciones a Quim Torra, el 'president' por delegación, para que evite coincidir con el Monarca en algún acto oficial. De hacerlo, deberá exigirle al Monarca que 'pida perdón a los catalanes" por su discurso del 3 de Octubre, en el que defendió la Constitución contra el golpe de Estado secesionista. Los separatistas están crecidos tras la salida de Mariano Rajoy de la Moncloa. No aciertan aún a orientar sus pasos futuros pero tienen claro que aprovecharán esta presencia del Rey para hacerse oir, según las fuentes consultadas. "O plantón institucional o discurso vehemente",. comentan las fuentes consultadas.
Felipe VI vuelve este fin de semana a Cataluña, ya sin el 155 en vigor. Presidirá, a falta de confirmación oficial, la inauguración de los Juegos del Mediterráneo en Tarragona. El jefe del Estado viajará hasta Tarragona casi recién aterrizado de un periplo por Nueva Orleans, San Antonio y Washington, donde mantendrá un encuentro con Donald Trump.
El independentismo afila su letanía de reproches ante esta visita. El presidente de la Generalitat tampoco ha confirmado aún su presencia en el acto. Nadie en su entorno oficial ha concretado hasta el momento sus planes para este viernes, cuando se abren los Juegos del Mediterráneo, una iniciativa en la que participan las administraciones del Estado, autonómica y la provincial. Un acontecimiento deportivo que estuvo durante meses en el aire pendiente de la evolución de los acontecimientos políticos en Cataluña.
El mensaje de la Corona
Quim Torra prepara un discurso 'a la medida' para la ocasión. Un reproche frontal a la actuación de la Corona, a la firmeza de don Felipe durante los episodios de octubre del pasado año que desembocaron en la proclamación de la independencia. Los separatistas pretenden que le reclame al Jefe del Estado un gesto de contrición por sus palabras del 3 de Octubre. "El Rey decidió que ya no era Rey de los catalanes, podía haber hecho un llamamiento a la concordia o incluso darle un toque a ambas partes. Erigirse en árbitro o mediador", señalaba días atrás Elsa Artadi, consejera de Presidencia y portavoz del 'Govern'.
"La Generalitat no puede actuar con normalidad con una persona que ha justificado la violencia. El president de la Generalitat y el del Parlament no le pueden recibir con una sonrisa y un apretón de manos", añadía Artadi. Este será el tono de la bienvenida de independentistas. Ni sonrisas de cortesía ni pasar página de lo ocurrido. Desaparecido Rajoy, ahora es el Rey el objetivo principal de la 'república', según dicen en sus mensajes de propaganda.
"Majestad, así no", había mencionado Torra en su discurso de investidura, haciendo suyas unas palabras pronunciadas por Puigdemont en uno de sus mensajes tras el intento de proclamación de la independencia. Pedro Sánchez podría ejercer de mediador en esta complicada ceremonia de Tarragona. El alcalde de la ciudad, Josep Felix Ballesteros, es del PSC, y necesita el respaldo del presidente del Gobierno en una situación tan comprometida. Sánchez ha enviado algunos mensajes de 'distensión' o 'desinflamación' hacia el gobierno catalán y está pendiente de un encuentro en Moncloa con Torra. En el caso de que acuda a Tarragona, será el primer contacto personal entre ambos mandatarios, con la Corona en primer plano.
Premios en Gerona
El mes se augura tenso para la Corona en Cataluña. Don Felipe también tiene previsto trasladarse el 28 de junio a Gerona con motivo de la entrega de los premios de la Fundación Princesa de Girona, que la alcaldesa de aquella localidad ha boicoteado. El Ayuntamiento secesionista ah negado el Auditorio municipal para que se celebre el acto, en contra de lo que se ha venido haciendo hasta el momento. La Fundación ha optado por trasladar el acto a la localidad de Vilablareix, en el Celler de Can Roca, uno de los centros gastronómicos más importantes de Cataluña y de España.El baloncestista Pau Gasol, la nadadora paraolímpica Teresa Perales y el doctor Valentín Fúster estarán presentes en la ceremonia. No se espera representante alguno de la Generalitat para acompañar a Sus Majestades en esta ocasión.
La última vez que Don Felipe viajó a Barcelona tuvo lugar en abril, al objeto de presidir la entrega de despachos a la última promoción de jueces. Un acto con el 155 aún en vigor y sin presencia alguna de autoridades catalanas. Ahora será diferente puesto que la designación de un 'Govern' efectivo y sin problemas con la Justicia ha propiciado la retirada del polémico artículo. La duda es saber si Torra asistirá al acto de Tarragona y, de hacerlo, cual será el contenido de sus palabras, si es que el protocolo le concede esa posibilidad.
