El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy, hablaron por teléfono poco después de conocerse las intenciones de ETA. Se trataba de su segunda conversac ión en cuatro días sobre la proximimidad de un comunicado "potente", que podría anunciar, como así ha sido, el cese definitivo de la violencia,según adelantó Vozpópuli.
El hombre al que todos los sondeos apuntan como el próximo inquilino de La Monclao ha expresado su satisfacción por la noticia, aunque matizara que ésta no sería completa hasta la total disolución de la banda terrorista. En todo caso su valoración, ha resultado mucho más modulada que la de otros miembros de su partido.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, puso el acento en que ETA "ni entrega las armas ni se disuelve" y que sus comunicados "tienen credibilidad cero". Por su parte, el que fuera direc tor general de la Policía bajo los gobiernos de José María Aznar, Juan Cotino, fue mucho más duro al afirmar que "el comunicado es parte de la mentira habitual de ETA". Fuentes de la dirección nacional de partido han subrayado, no sin ironía, que la postura oficial del PP "es la manifestada por Rajoy y si alguien opina otra cosa que presente una enmienda en el Congreso"
Rajoy ha preparado la declaración en el despacho de la planta séptima de Génova junto a Federico Trillo, Ana Mato y Soraya Sáenz de Santamaría. Antes también se mantuvo en contacto con el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, con quien coordina los mensajes en torno a la política anti terrorista.