Economía

El Estado sufre pérdidas millonarias en Bolsa con su inversión de 2.285 millones en Telefónica

Compensa vía dividendos el deterioro de su paquete del 10% como contrapeso a la irrupción de Arabia Saudí.

  • Pedro Sánchez -

Se deteriora la participación estatal en Telefónica. El Gobierno, a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), tomó el 10% de la compañía de telecomunicaciones a finales de mayo, para lo que tuvo que desembolsar 2.285 millones de euros. Siete meses después, el paquete de 567.016.696 títulos del Estado cerró el ejercicio 2024 con pérdidas latentes en Bolsa de 53 millones.

El 20 de mayo, la Sepi culminó la compra del 10% en Telefónica para contrarrestar el asalto de Arabia Saudí. STC, propiedad de la familia real saudí, irrumpió por sorpresa en septiembre de 2023 en la compañía con un 9,99% y provocó un terremoto en el accionariado.

El Gobierno intentó movilizar en un primer momento a grandes fortunas españolas para equilibrar el poder en Telefónica, pero finalmente se decantó por regresar a la compañía casi 30 años después de su privatización.

La sociedad estatal anunció que había adquirido la participación de algo más de 567 millones de acciones a un precio medio de 4,0295 euros por unidad. A cierre de 2024, el precio de los títulos de Telefónica se intercambiaba a 3,9370 euros. Es decir, con un descuento del 2,3% respecto a la inversión media que tuvo que hacer el Estado.

Ahora bien, el plan del Gobierno en Telefónica es más político que económico. Sin ir más lejos, colocó como consejero en su representación a Carlos Ocaña Orbis, coautor del libro de la tesis de Pedro Sánchez, incluso antes de alcanzar la meta del 10%. También tiene un sillón en el máximo órgano de gobierno Javier de Paz, hombre de confianza de Moncloa que con el fallecimiento del vicepresidente Javier Echenique gana enteros a retener su puesto.

Inlfuencia del Gobierno

El mandato de Javier de Paz caduca en 2026 y podría ser la vía para que el Gobierno equilibre las fuerzas a su favor de forma indirecta y evitando que otros grandes accionistas, como STC o Criteria (también con un 10%), se decanten por pedir otro consejero más.

Pero no todo son malas noticias económicas para la inversión del Estado. Con su paquete, ya ha ingresado unos 170 millones brutos correspondientes a los dos dividendos de la teleoperadora en 2024. Telefónica se comprometió en noviembre de 2023 a pagar un dividendo anual de 0,30 euros brutos por acción “mínimo” hasta 2026. Este pago en efectivo se suele realizar en junio y diciembre.

Por cada uno de los tramos, la Sepi ha ingresado unos 85 millones brutos. Aplicando las retenciones fijadas por normativa, del 19% en el caso de los dividendos, el Estado ha percibido casi 138 millones neto de impuestos, que equivaldrían al 6% de la inversión para tomar el 10% del capital.

Política de dividendos atractiva

La política de dividendos de la compañía es el principal motivo para que otros accionistas de referencia mantengan su inversión. Este es el caso de BBVA, que da prioridad a ingresar unos 80 millones al año a retener su histórico sillón en el máximo órgano de gobierno. El grupo bancario está representando en Telefónica por José María Abril, que ejerce como vicepresidente de la compañía desde 2007 y fue reelegido por última vez en abril de 2022 por otros cuatro años.

Por su parte, CriteriaCaixa alcanzó a finales del pasado junio, cuando Telefónica ya había abonado el primer tramo de su dividendo anual, una posición del 9,99% en el capital de la operadora, casi el doble del paquete que poseía hasta entonces. De este modo, se ha embolsado casi 130 millones al cobrar en el primer pago de junio sólo la parte correspondiente a poco más del 5%.

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