El Partido Comunista de Rusia es la segunda fuerza más votada con el 19,15 por ciento de los votos, un notable aumento comparado con los comicios de hace cuatro años (11,57). Mientras, la socialdemócrata Rusia Justa, obtenía un 13,16 (7,74 en 2007), y el ultranacionalista Partido Liberal Democrático sumaba un 11,67 por ciento (8,14 en 2007). Estos son los únicos partidos que han superado el 7 por ciento de votos, el mínimo requerido para acceder al reparto de los 450 escaños de la Duma.
El partido liberal Yábloko conseguía el apoyo del 3,21 por ciento de los ciudadanos; los nacionalistas de Patriotas de Rusia, el 0,96; y Causa Justa, el 0,59 por ciento.
El resultado representa un fuerte descenso en relación con las pasadas elecciones legislativas en las que obtuvo un 64,3 por ciento de los votos, 315 escaños de la Duma o cámara baja del Parlamento ruso.
La formación oficialista, que es vinculada por muchos rusos con la burocracia corrupta, no alcanzó el 50 por ciento de los votos en muchas regiones de Rusia, incluido la capital, Moscú. En la capital rusa, de hecho, RU perdió el ocho por ciento de los votos en relación a 2007, aunque alcanzó el apoyo del 46 por ciento de los votantes. Dos populosos distritos de la ciudad prefirieron a los comunistas y a los liberales de Yábloko y dejaron al partido de Putin en tercer lugar.
En otras, como la caucásica república de Chechenia, el partido del Kremlin se acercó al 100 por ciento de las papeletas emitidas.
Con estos resultados, casi definitivos, RU logrará la mayoría absoluta en la cámara de diputados, que se sitúa en 226 de los 450 escaños. Eso sí, perderá la mayoría constitucional de 300 de los 450 escaños, por lo que tendrá que pactar con otras fuerzas si quiere enmendar ciertas leyes de la Carta Magna.
Por otra parte, Yábloko, considerado por muchos analistas como la única oposición real al Kremlin que optaba a entrar en la Duma, anunció en la madrugada de hoy que impugnará los resultados de los comicios. "Impugnaremos los resultados de las elecciones", afirmó Grigori Yavlinski, cabeza de lista de Yábloko, que no está de acuerdo con los resultados que le concede el escrutinio de los votos, informaron las agencias rusas.
Rusia Justa denuncia fraude electoral en San Petersburgo
El líder de la formación Rusia Justa (RJ), Serguéi Mirónov, denunció hoy fraude en el recuento de papeletas en San Petersburgo, la patria chica del primer ministro ruso, Vladímir Putin. Según Mirónov, un diputado regional de su formación fue arrestado en la madrugada de hoy. "Están reescribiendo descaradamente las actas electorales en San Petersburgo. Mañana estaremos en la calle", escribió Mirónov en su Twitter.
Otro diputado regional de San Petersburgo, Oleg Nílov, "se llevó una paliza a manos de la policía cuando trataba de impedir el fraude electoral", denunció una dirigente de RJ, Oksana Dmítriyeva, citada por la agencia rusa Interfax.
La policía de San Petersburgo, por su parte, calificó de provocadora la actitud de Nilev en el colegio electoral.
Los comunistas tampoco están conformes
El líder comunista ruso, Guennadi Ziugánov, denunció hoy que el partido oficialista Rusia Unida (RU) sufrió una "derrota aplastante" en las parlamentarias del domingo y que le dieron hasta un 15 % más de votos de los que realmente obtuvo."Las elecciones fueron absolutamente ilegítimas tanto desde el punto de vista jurídico como moral", afirmó Ziugánov en rueda de prensa.
Ziugánov, que lidera la segunda fuerza más votada en las elecciones legislativas, aseguró que a RU, que según los resultados oficiales no definitivos obtuvo el 49,54 % de los votos, "le añadieron entre un 12 y un 15 %".Agregó que el Partido Comunista de Rusia va a defender "en la calle y en el ámbito jurídico" la votación lograda por su formación en los comicios, "sin precedentes por su suciedad y presiones".
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