La crisis económica está obligando a las grandes compañías a revisar sus políticas de remuneración al accionista (Telefónica, ha sido la última en anunciar un recorte), pero en el caso de las eléctricas se añade la losa del déficit de tarifa, unos 20.000 millones que pesan en las cuentas de las energéticas, y que los costes de refinanciación obligará a replantearse sus políticas de dividendo.
"No estamos seguros sobre la sostenibilidad del dividendo de las grandes eléctricas, después de la revisión regulatoria anunciada por Mariano Rajoy en el discurso de investidura, en el que alzó la preocupación sobre los precios de la energía y que los consumidores no pueden asumir íntegramente el problema del déficit de tarifa", dicen los analistas de Santander en una escueta nota a sus clientes a raíz de la sorpresa de que Endesa no repartirá dividendo a cuenta en enero.
Esto significa que las eléctricas tendrán que colaborar en la lucha contra el déficit de tarifa y podría traducirse en que el recibo de la luz podría congelarse, siguiendo las medidas políticamente correctas (el próximo viernes, el nuevo Gobierno publicará su decisión sobre el recibo de la luz de enero).
En este sentido, Santander defiende en dicha nota la última decisión de Endesa de no repartir dividendo en enero. Endesa decidió en el último consejo de administración del año saltarse el tema del dividendo a cuenta de 2011 por razones de responsabilidad y prudencia, con lo que de momento sus accionistas (92% en manos de la estatal italiana) no recibirán dividendo en le mes de enero, algo que no ha sucedido nunca. La eléctrica no comunicó esta decisión a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Simplemente no tocó el tema en su consejo. "Endesa podría retomar este asunto en el consejo de finales de febrero", dicen en el mercado.
Santander cree que tiene sentido la decisión de la compañía que preside Borja Prado por las previsiones de su balance y liquidez. La compañía tiene que refinanciar 6.400 millones en los próximos doce meses relacionados con el déficit de tarifa. Para el resto de las eléctricas, parece que el dividendo de enero está a salvo. "La mayoría de los accionistas de estas empresas dependen del cobro de este dividendo" (ACS en Iberdrola, por ejemplo).