El Gobierno permitirá que los jubilados puedan continuar trabajando y cotizando a la vez que perciben su pensión de jubilación. Esta será uno de las novedades de la reforma laboral, que previsiblemente se aprobará el viernes 10 de febrero. Según ha anunciado la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, la esperada normativa también incluirá modificaciones en la Formación Profesional y la creación de una "cuenta de formación" que acompañará al trabajador durante toda su vida laboral. La idea es que garantice el acceso a la formación permanente del trabajador.
El Ejecutivo quiere disminuir las prejubilaciones, excepto en casos excepcionales, y poner freno a la práctica de usar la prestación por desempleo como mecanismo de jubilación encubierta, ya que el 25 % de los trabajadores que acceden a la jubilación provienen del desempleo. Fátima Báñez ha comparecido ante la Comisión de Empleo y Seguridad Social donde ha esbozado las líneas generales de la reforma laboral, y que ha definido como "completa, equilibrada, operativa y útil".
Plan contra el fraude
De igual forma, pondrá en marcha un plan que mejore los controles en materia de prestaciones por desempleo y las bonificaciones a la contratación que en ningún caso se verán mermadas ni recortadas, ha enfatizado Báñez. Respecto al fraude, la ministra ha asegurado que habrá "tolerancia cero" y que se revisará el modelo actual de control anual mediante medidas adicionales que el Ejecutivo está ya estudiando y que mejorarán la distribución de los fondos públicos.
La titular de Empleo ha subrayado que habrá mayor vinculación entre políticas activas y pasivas y que el Gobierno hará una evaluación "rigurosa" de las políticas de empleo actuales para valorar el impacto del gasto en esta materia. En este terreno, ha asegurado que serán más exigentes y que se analizará con "eficacia, eficiencia y transparencia" la gestión de los fondos públicos.
Mayor flexibilidad
Además, Fátima Báñez ha destacado que se pondrá en marcha una mesa de diálogo social sobre las políticas laborales efectivas para jóvenes, de tal forma que los que no posean titulación tengan la posibilidad de, a través de un contrato adecuado, combinar formación y trabajo.
De la reforma laboral también ha resaltado que se va a adecuar a los autónomos y a las microempresas para que cuenten con una mayor flexibilidad para hacer frente a la crisis. La ministra ha precisado que hay más de 3 millones de autónomos y que de ellos 352.060, cerca del 12%, tienen trabajadores asalariados, por lo que uno de los primeros proyectos del Gobierno será aprobar una ley de apoyo a los emprendedores. Báñez también ha aprovechado para alabar el acuerdo de moderación salarial al que han llegado empresarios y sindicatos. Así, ha recordado, ahora hay 2,6 millones de ocupados menos que en 2007 y el paro ha aumentado en más de 3 millones de personas, lo que ha elevado la tasa hasta el 22,8 %.
Mutuas de accidentes
Por otra parte, la ministra ha expresado su voluntad de presentar un proyecto de ley para las mutuas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales de la Seguridad Social "en los próximos meses", tras una ronda de contactos con los agentes sociales. El objetivo de esta modificación será dotar de mayor autonomía y transparencia a este sector. También ha anunciado que habrá transformaciones en la Agencia de la Seguridad Social, con el propósito de que los procesos sean más modernos y un mejor uso de los modelos de gestión.
Fátima Báñez, ha confiado en que los sindicatos no convoquen una huelga general en protesta por la reforma laboral. En este sentido, ha apelado a la responsabilidad de los agentes sociales para que no salgan a la calle y recordado que los agentes sociales ya han dado "grandes pasos" hacia la moderación salarial.