El humorista sevillano, Manu Sánchez, lleva seis meses luchando contra un cáncer testicular y en su vuelta a los medios de comunicación ha abierto su corazón para compartir las enseñanzas que ha sacado de esta enfermedad contra la que sigue luchando. En una emotiva entrevista en 'Hora 25' de la Cadena Ser, el periodista nazareno, ha querido remarcar que la vida no es para siempre y que hay que vivir el ahora. “Lo más duro de todo fue aceptar mi propia muerte, creo que es el gran ejercicio, darte cuenta que esto se puede acabar en cualquier momento”. Así comenzaba el humorista sevillano su entrevista que se ha vuelto viral en redes sociales.
Manu ha conseguido, en medio de la vorágine social que vivimos, que paremos un poco y reflexionemos sobre como estamos viviendo. “Todos damos por hecho que vamos a tener como ochenta y tantos años o noventa para entregar el examen, entonces todavía estamos releyendo las preguntas, todo lo vamos posponiendo, pero yo he aprendido que en cualquier momento te dicen ‘entregamos’, y tu levantas la mirada y dices pues voy por la pregunta dos, pues entregamos”. Está metáfora de vivir el ahora, se ha colado en la vida de todos, el video de Manu Sánchez se ha hecho viral y no hay grupo de WhatsApp que no lo haya compartido, pero sin duda lo más importante es que ha conseguido transmitir esa enseñanza sin que hayamos tenido que pasar por su enfermedad.
“Asumir mi propia muerte me ha hecho más fuerte, hace que ahora me importe todo un poquito menos”Manu Sánchez, humorista
Lejos de la pena y con el sentido del humor que se le presupone a un humorista, Manu ha querido explicar que al asumir su propia muerte también tenía que asumir que la vida seguiría sin él, por eso en un ejercicio de amor profundo aseguraba que "me iba a la cama y pensaba, ojalá la persona con la que rehaga la vida mi pareja sea un tío de puta madre porque va a educar a mis hijos”. Por ello avisaba a su mujer y lo contaba entre risas que le explicó que hay que medir muy bien los tiempo porque hay una delgada linea que separa el “es muy joven la muchacha es normal que rehaga su vida” al “estos se conocían de antes”.
“Llegúe a plantearme que era eso de salir bien de una operación”
Pese a que el sevillano se ha agarrado a la vida con uñas y dientes y ha decidido dejarse la piel en esta batalla para intentar ganar, también asegura que llegó a plantearse si la mejor salida a la enfermedad era vivir. “En mitad de este proceso me han dicho te vamos a operar, vamos a sacar cosas afectadas de dentro, pero puede que quedes parapléjico, en diálisis, no sabemos…” Ante esto, el humorista asegura que llegó a pensar en alguna ocasión que sería una carga para su familia, si las cosas no salían del todo bien. “He vuelto a aprender que en la vida merece la pena tirar para adelante, seguir luchandola, si hay que aprender a hablar de nuevo, a andar, a estar de nuevo y de otra forma en los sitios, pues se aprende. Intentemos arañarle tiempo al examen pero hagamos las cosas ahora, porque no sabemos cuando suena la vocecita de ‘entregamos’ y como te pile a la mitad se te va a quedar cara de tonto por haber dejado tantas cosas sin hacer”.
Sus hijos y la particular forma de dejarle “miguitas” en forma de tiempo compartido
Si algo ha hecho de Manu Sánchez un luchador aún más potente ha sido la posibilidad de ver crecer a sus dos hijos, Manuel y Leonor. La experiencia del humorista sevillano con el cáncer es casi de película. Fue el día 19 de abril cuando le informan que padece cáncer, aunque aún no saben donde ni qué está afectado y a las 48 horas, el día 21, venía al mundo su pequeña Leonor, en esos momento el sevillano aseguraba que “tenía claro que yo a Leonor no podía robarle su alegría”.
Y de esta forma, y anteponiendo la felicidad de sus hijos a esta enfermedad que en ocasiones se vuelve un pozo oscuro, Manu ha compartido una entrañable anécdota con su hijo Manuel. “Cuando nació Manuel (4 años) yo me había quitado la barba porque estaba en el concurso ‘Tu cara me suena’ así que le sugerí a Manuel hacer lo mismo con Leonor. Mi hijo me dijo que mejor la barba y el pelo como el ‘capitán calzoncillos’ así que el día que Manuel me vio sin pelo y sin barba por la quimioterapia pensó que había accedido a su reto”. Sin duda, la inocencia del pequeño que ha ayudado a Manu Sánchez en los reveses de la enfermedad.
El humorista sevillano ha querido con esta entrevista contar no solo la batalla física contra el cáncer, sino la emocional, la de los miedos. Ha conseguido dejar un valioso recordatorio de que en cualquier momento la vida nos puede decir “entregamos” y más nos vale haber vivido plenamente y llevar el examen casi terminado.
