Nada más comenzar su turno de intervención la portavoz del PSOE andaluz en el Parlamento, Ángeles Férriz, ha reprochado al presidente de la Junta, Juanma Moreno, los "8.000 despidos" de sanitarios que fueron contratados, como refuerzo, al inicio de la pandemia, y entre los que no hay ningún médico. La mayoría son enfermeros y analistas para las pruebas PCR que se realizaron y que ahora ya no son necesarios. A la formación que lidera Juan Espadas lo que le interesa es hacer mucho ruido con este asunto, que ha convertido en un mantra, con las mareas blancas en la calle. Sin embargo, Férriz ha naufragado en su cara a cara con el gobernante del PP, al quedarse fijada en argumentos que han sido fáciles de desmotar por parte de Moreno Bonilla.
Más allá de la utilización de los datos sobre dichas contrataciones que quiera hacer el PSOE lo realmente importante y que, de hecho, preocupa al presidente y a sus socios de Gobierno de Ciudadanos es la atención primaria en los centros de salud, que deja mucho que desear, algo que ha encendido las alarmas en el seno del Ejecutivo autonómico, prueba de ello es el apartado que a este asunto ha dedicado Moreno en su intervención de apertura de esta primera jornada del debate parlamentario sobre el estado de la Comunidad.
Férriz ha utilizado en todo momento un tono bronco y gritón en su discurso faltón y estridente, como si estuviera en un mitin: "Macarena Olona le tiene cogido por los Presupuestos", le ha espetado al presidente desde el atril, en alusión a la que se perfila como posible candidata de Vox. Una acusación, cuando menos, desafortunada porque la formación de Santiago Abascal ya dejó claro hace tiempo que no apoyaría las cuentas de 2022.
Lejos quedan los tiempos del antecesor de Férriz, José Fiscal, portavoz con Susana Díaz, ahora destinada al Senado. Cómo será este "nuevo PSOE" que Juanma Moreno, en su réplica a Férriz, ha llegado a echar de menos, con añoranza, a "aquel PSOE andaluz", previo a que la federación andaluza se convirtiera en lo que él mismo llamó la pasada semana "vieja sucursal" de Ferraz, con el mando a distancia de Pedro Sánchez sobre su delegado andaluz, Juan Espadas, líder de un partido "en transición", una afirmación ésta que ha irritado especialmente a la bancada del principal partido de la oposición.
Férriz se ha jugado a una sola carta su cara a cara con Moreno. Su afán ha sido, en todo momento, sacarle de sus casilla con otro mantra poco creíble: "usted es muy de derechas". Frente a su discurso, la portavoz del PSOE-A se ha encontrado con la antítesis de Vox hacia el presidente: "usted parece del PSOE". Los dos partidos han conseguido con ello, de forma involuntaria, fijar en el centro del tablero político al considerado como uno de los barones más moderados del Partido Popular, junto a Alberto Núñez Feijóo.
Tampoco ha ayudado a la conciliación, por parte del PSOE, el hecho de que Juan Espadas tildara hablara del "cinismo" de Moreno, al acusarle de reivindicar el diálogo sin haber dado "contestación" a las propuestas que el Grupo Socialista ha trasladado a la Junta para buscar un posible acuerdo de cara a la aprobación del Presupuesto andaluz para 2022. Ha sido en un corrillo de micrófonos a las puertas del Parlamento durante un receso, contando con el altavoz inestimable de Canal Sur Televisión en directo, que ha 'pinchado' la intervención de este candidato extraparlamentario que, como es sabido, no cuenta con escaño en el antiguo Hospital de las Cinco Llagas.
A preguntas de los periodistas, Espadas ha insistido en señalar que su "oferta de diálogo" con la Junta para el Presupuesto ha sido "sincera", y que ha tratado de "dialogar para alcanzar un acuerdo sobre la base de algunas cuestiones de interés prioritario de la sociedad andaluza", que "pusimos encima de una mesa y las cuantificamos".
Puentes rotos con el PSOE
A estas alturas está roto ya cualquier puente de acuerdo entre PP y PSOE, a pesar de que Moreno ha insistido en que negociará "hasta la extenuación" para intentar sacar adelante los Presupuestos 2022. Ante las acusaciones de los socialistas sobre sus acuerdos y pactos con Vox, Moreno le ha preguntado, de forma retórica a Férriz si sabía lo que era Bildu. Tras recordarle a la portavoz opositora los asesinatos de ETA en Andalucía, ésta le ha respondido que dejara "a los muertos en paz", al tiempo que se ha referido a los asesinados socialistas.
"Si hay prórroga presupuestaria, vendrá un bloqueo de la acción de Gobierno y la oposición irá empujando hacia un callejón sin salida. No será bueno para Andalucía. Yo voy a seguir remando para acabar el ciclo". Así concluía Moreno la jornada, en el turno de réplica al portavoz de Vox, Manuel Gavira, que sigue acusando al PP de no cumplir sus acuerdos, firmados cuando en Enero de 2019 posibilitó el Ejecutivo de centroderecha y la posterior aprobación de hasta tres Presupuestos.
En el seno del Gobierno andaluz las fuentes consultadas por Vozpópuli dan ya por hecho que se encaminan hacia una prórroga del Presupuesto de 2021. Así pues, sale reforzado el discurso del vicepresidente, Juan Marín, quien llegó a afirmar que Espadas no aprobaría "ni muerto" unas cuentas de PP y Cs. Lo último que dijo, tras ser tan tajante, fue que contemplaba una "abstención remota" del PSOE-A. En cualquier caso, lo que ha quedado claro ya es que la intervención de Ferraz, a través del todopoderoso dirigente andaluz Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, ha dado al traste con cualquier atisbo del llamado "pactismo" con el PP que propugnaba Espadas, un alcalde acostumbrado a negociar y aprobar presupuestos municipales en el Ayuntamiento de Sevilla a derecha e izquierda, con Ciudadanos y Podemos.