La Interpol cuenta con notificaciones rojas para solicitar a las autoridades de todo el mundo la localización y detención provisional de una persona que está acusada por algún tribunal de un país miembro o porque se exige su ingreso inmediato en prisión tras ser juzgado. Hay un total de 66.370 notificaciones activas, aunque 7.669 son de acceso público. De estas últimas, hay diez que pertenecen a nuestro país, entre los que destaca Antonio Anglés, el principal sospechoso de ser el asesino del ‘caso Alcàsser’.
Las alertas rojas de Interpol cuentan con diferente información que permite a las autoridades locales reconocer a la persona buscada. Estos datos son, entre otros, el nombre, la fecha de nacimiento, la nacionalidad y ciertos rasgos físicos, además de fotografías y huellas dactilares si las hubiera.
Además, se ofrece información relacionada con los delitos por el que están en busca y captura. Entre los españoles, la mayoría de las personas que están en el listado público se les quiere enjuiciar -o encerrar- por tener una relación, de uno u otro modo, con el narcotráfico, aunque en Interpol hay cabida para delincuentes con toda clase de delitos, desde terrorismo hasta robo a mano armada.
Por supuesto, para que la Interpol emita una notificación roja, es necesario cumplir con el Estatuto de la organización, así como con sus textos normativos. Esta no equivale a una orden de detención europea o internacional, aunque sí es importante su existencia porque garantiza que las autoridades policiales de los países miembros tengan al instante toda la información sobre un delincuente.
Esto equivale a prácticamente todo el mundo, ya que Interpol cuenta con 194 países miembros, lo que le convierte en la organización policial más importante de Europa.
¿Por qué hay notificaciones rojas públicas?
Antonio Anglés ya estaba en esta lista, pero se ha reactivado su búsqueda para esclarecer lo que sucedió en el año 1992 y llevarle ante la Justicia. Su perfil está seleccionado entre los que puede ver cualquier usuario de la red porque desde la Interpol solicitan la colaboración ciudadana para su localización.
La mayoría de las personas que figuran como notificaciones rojas de Interpol tienen su perfil oculto para la ciudadanía, de tal forma que tan solo los servicios policiales de los países miembros tienen acceso. Además del motivo por el que se muestran los datos de Anglés, Interpol puede hacerlo porque algún delincuente represente algún tipo de amenaza para la seguridad de los ciudadanos. Por tanto, la captura de estos fugitivos se antoja prioritaria, ya que las policías de los estados miembros han decidido dar un paso más para lograr encontrarles.
Los españoles más buscados por la Interpol
Además de Antonio Anglés, hay otros 10 españoles a los que se busca en zonas concretas de todo el mundo por sus delitos. La mayoría de ellos superan los 50 años de edad y están relacionados con el narcotráfico, aunque hay otros perfiles a los que se les acusa de otros delitos graves como el del hispano brasileño.
José Luis Folgueras Álvarez
Se trata de un antiguo miembro de ETA buscado en Francia por narcotráfico. Está condenado a 10 años de cárcel. En 1996 estuvo implicado en una operación en la que se decomisaron 150 kg de cocaína y 85 millones de pesetas (algo más de medio millón de euros). Tiene 70 años y es procedente de Gijón.
Juan Gil Palau
También se le busca en Argentina por contrabando de armas. Este valenciano, de cincuenta años de edad, formó parte de una red que se encargaba de recibir la mercancía en España desde el país donde se le busca para después trasladarla hasta Holanda, donde las comercializaban. Este armamento partía de Paraguay hasta Buenos Aires para después navegar hasta nuestro país. En la operación se incautaron 2.500 armas, entre las que se encontraban un mortero y un cañón antiaéreo.
Johnatan Víctor Herrera
De nacionalidad española y venezolana, es buscado por la justicia de Estados Unidos por una agresión sexual grave a una menor de edad. Con apenas 31 años, el hijo del exjugador de la NBA Carl Herrera fue visto por última vez en 2015 en un partido de baloncesto en Venezuela, donde se le intentó atrapar, aunque se escapó. No se sabe donde está desde entonces.
Sobre los otros españoles buscados por Interpol hay menos información pública, aunque sí los delitos que han cometido. Ismael García, Álvaro Cascales y José Gómez están relacionados con el narcotráfico en la modalidad de transporte, comercialización y almacenamiento de los mismos.
Por su parte, a José Sánchez se le busca en Brasil por delitos contra el sistema financiero del país y por participación en organización criminal, mientras que a Andrés Felipe Alzate, de nacionalidad española y colombiana, se le acusa de falsificar documentos en Polonia. A Juan Marín Cárdenas se le busca en Brasil por extorsión.
¿Cuáles persigue España?
Antonio Anglés es uno de esos criminales que está siendo buscado por España para llevarle a juicio, aunque no se descarta que esté en Sudamérica -Brasil es su país natal- o en las islas británicas, último lugar donde fue visto. A él se suman dos fugitivos extranjeros que Interpol considera que se encuentran en nuestro país.
España ha lanzado una notificación roja para tres delincuentes, aunque solo Anglés es español: Elena Puzyrevich es rusa y Jamal El Khattab es de Gaza
El primero es Jamal El Khattab, al que se busca por trata de seres humanos. Nacido en Alnusairat (Gaza), tiene 53 años y se cree que está escondido en nuestro país. También se busca a la rusa Elena Puzyrevich en España por inmigración ilegal, trata y otros delitos relacionados con la prostitución. Captaba chicas en Rusia y las obligaba a trabajar en clubes de alterne. Pese a ser enjuiciada a 12 años y medio de prisión, nunca pisó la cárcel.
Por lo que se ve, la Península Ibérica no es un buen escondite para los delincuentes, ya que en Portugal no se busca a ningún delincuente, mientras que en nuestro otro país vecino, en Francia, sí hay muchos más criminales: hay 32 en total.