Basque Civil Rights, una plataforma a favor de la candidatura de Arnaldo Otegi promovida por 127 personalidades del País Vasco, entre ellas dos exlehendakaris, suma ya más de 18.000 firmas desde que fuera presentada en público el pasado 26 de agosto por Paul Ríos, último coordinador de Lokarri, un movimiento social por el diálogo y el acuerdo, la exconsejera de Empleo socialista Gemma Zabaleta y el catedrático de la Universidad del País Vasco, Pedro Ibarra.
El manifiesto, muy breve, que ha sido escrito por el dramaturgo Alfonso Sastre, pretende llamar la atención sobre lo que considera “un grave problema que afecta a la calidad de la democracia en este lugar y en este momento”, como es la inhabilitación de Otegi, a quien atribuye “la apertura de nuevos tiempos en este país”. Circunstancia pese a la cual se pretende evitar, dice el texto, que “ocupe, por medio de las urnas, un puesto de alta responsabilidad en el futuro”.
Impedir su candidatura es como decir: mire usted, aparte de condenarle a prisión, como nos cae gordo le liquidamos políticamente", dice el catedrático Pedro Ibarra
La candidatura de Arnaldo Otegi a lehendakari en las elecciones autonómicas vascas del próximo 25 de septiembre fue anulada el pasado 24 de agosto por la Junta Electoral Territorial de Guipúzcoa, territorio por el que el dirigente abertzale concurría como cabeza de lista, que ratificó su acuerdo el día 29. La defensa de Otegi, que dirige el letrado Íñigo Iruin, presentó el jueves un recurso ante el Juzgado de lo Contencioso de San Sebastián, que fue rechazado este viernes. La defensa del líder abertzale recurrirá ahora al Tribunal Constitucional, que deberá pronunciarse de manera definitiva antes del día 9, fecha en que arranca la campaña electoral.
“Mi argumentación a favor de la candidatura de Otegi no es jurídica, aunque trabajé mucho tiempo como abogado –dice Pedro Ibarra, una de las personas que encabezan el manifiesto-. Es pura y simplemente un problema de democracia mínima. ¿Cómo es posible que se pueda condenar a una persona a la muerte civil? Es como decir: mire usted, aparte de que le condenamos a una pena de prisión, y no vamos a entrar en el disparate que supuso ya esa decisión, como nos cae gordo le liquidamos políticamente. Es una cosa demencial desde el punto de vista de la democracia, de los derechos, y casi diría que del sentido común”. Una opinión similar a la de Paul Ríos, para quien el líder abertzale “fue condenado cuando intentaba hacer aportaciones en el camino hacia la paz y la normalización. Que ahora se le impida concurrir a las elecciones me parece mal”.
Entre los promotores iniciales del documento de apoyo al líder abertzale figuran los exlehendakaris Carlos Garaikoetxea y Juan José Ibarretxe, así como el exconsejero de Justicia Joseba Azkárraga y los exalcaldes de Vitoria y Getxo, José Ángel Cuerda e Iñaki Zarraoa, respectivamente. Entre las personalidades internacionales que han suscrito el manifiesto figuran Gerry Adams, presidente del Sinn Féin, Helmuth Markov, exprimer ministro de Brandeburgo y exministro de Justicia de Europa o Lucía Topolansky, presidenta en funciones de Uruguay. No faltan representantes de la política catalanas como Lluís Llach, diputado de Junts pel Si, Joan Tardà, diputado por ERC, o Anna Gabriel, parlamentaria autonómica por la CUP. Firman también el manifiesto músicos como Kepa Junkera y Fermin Muguruza, el actor Patxi Biskert, el filósofo Santiago Alba Rico o el profesor de la Universidad del País Vasco Ramón Zallo, entre otros.
