Artur Mas, candidato de Junts pel Sí (Juntos por el Sí), quiere aprovechar el resultado de las elecciones del 27S para reivindicarse ante Europa y Estados Unidos. Ese caracter plebiscitario nada disimulado de esta convocatoria se manifiesta una vez más en el llamamiento que ha realizado ante las cámaras de AraTV: "Sería un mensaje muy importante, porque tanto Europa como Washington verían que, incluso en las peores condiciones, hemos obtenido la mayoría". "Si logramos la mayoría en el Parlament, tendremos la fuerza y la legitimidad para no detener este proceso", sentencia.
No duda el todavía presidente de la Generalitat que Cataluña se mantendría en el seno de la Unión Europea en caso de una hipotética independencia, por mero "pragmatismo". "Quedar protegidos económicamente no interesa sólo a los catalanes, también a España y a la UE. ¿Le interesa a Europa pagar aranceles y tener aduanas para trasladar sus mercancías y servicios a España?" Era una pregunta retórica que él mismo respondió: "absurdo".
Ha intentado Mas en la citada entrevista tranquilizar a los que dudan sobre la situación económica en la que quedarían empresas y empresarios. La grabación tuvo lugar antes de la declaración de la banca, que lanzó un claro mensaje de alerta contra el soberanismo. "Queremos hacer las cosas bien y si yo soy presidente, puedo garantizar que ninguno se enfrentará a una situación personal violenta que le cree inseguridad jurídica", declaró. De estas palabras se deduce que no alberga dudas sobre quién sería la persona que lideraría ese hipotético proceso: él mismo. Incluso a pesar de las dudas que ha esgrimido la CUP, posible llave de Gobierno.
Insiste en lo que él denomima voluntad de diálogo: "No tenemos un planteamiento de conflicto. No queremos desentendernos de la deuda, de la solidaridad. Queremos hacerlo bien y que España no resulte perjudicada". Sobre la postura de la UE en unas hipotéticas negociaciones, declaró que tiene confianza en que no hará falta una mediación.
Mas ha cerrado el mitin central de Junts pel Sí en La Farga de L'Hospitalet del Llobregat (Barcelona) este sábado. El número cuatro de la coalición ha pedido para el 27S la misma "actitud de combate" y de "revuelta" que la exhibida el 9N, cuando la gente fue a votar a pesar de "todas las fuerzas de la intimidación" del Estado. El líder de CDC realizó una fervorosa apelación a votar por el "cambio real".
