El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, ha abundado este sábado en sus críticas al de la Generalitat, Artur Mas, de utilizar a los ciudadanos como instrumento de su propias ambiciones y "llevarlos a una aventura condenada al fracaso" además de a un "viaje temerario que traerá parálisis, inestabilidad e incertidumbre", así como a un "limbo que nadie conoce".
En un mitin en el Puerto de Tarragona ante más de 800 personas, ha aparcado las ofertas de diálogo lanzadas el viernes desde Lleida para centrarse en las críticas al presidente de la Generalitat y candidato de CiU a la reelección, al que ha vuelto a acusar de ser un mal gobernante y generar un "debate que va contra el mundo, el sino de los tiempos y el sentido común". Rajoy también ha acusado a Mas de no tener “agallas” para afrontar la crisis y de ser un gobernante “a la fuga”.
Rajoy ha defendido que levantar barreras y fronteras va contra la corriente histórica y el espíritu de la UE, "es un torpedo en la línea de flotación del proyecto europeo", y ha censurado que el proyecto soberanista de Mas ignore las leyes, los tratados europeos y la voluntad de los europeos y los ciudadanos. En opinión de Rajoy, Mas ha embarcado a Cataluña en un debate soberanista por no ser capaz de gestionar la situación que vive la comunidad autónoma.
El líder del PP, además, ha presentado a su partido como la "casa común" de catalanes y españoles, y ha llamado a "no hacer caso a quienes" hablan de desafección entre Cataluña y España o a quienes "se buscan enemigos exteriores". Cuando Rajoy ha tomado la palabra, un grupo de media docena de manifestantes le ha interrumpido al grito de 'no es una crisis, es una estafa'. Han sido desalojados inmediatamente entre gritos de 'fuera, fuera' y abucheos