La Generalitat está presionando a los alcaldes de Cataluña para que cedan locales municipales en los que instalar las urnas del sucedáneo de consulta del 9 de noviembre. Según informa El País este viernes, los 700 regidores de los municipios menos poblados de Cataluña han recibido durante toda la semana correos electrónicos y llamadas telefónicas del Gobierno catalán en los que se les “reclama” que faciliten la relación de esos locales y las personas que se harán cargo de ellos, que tendrán que inscribirse como voluntarios y facilitar DNI, teléfono móvil y correo electrónico.
El diario aclara que, al no tratarse de actos administrativos, estos requerimientos no pueden impugnarse ante los tribunales. Desde que el presidente Artur Mas cambió la consulta soberanista por un “proceso participativo”, la Generalitat trata de esquivar la oficialidad de los trámites encaminados a su celebración para evitar que el Gobierno vuelva a acudir al Tribunal Constitucional para suspenderlos, como ocurrió con la ley de consultas y el decreto de convocatoria firmado por Mas.
El poder territorial que CiU y ERC sobre los municipios y el hecho de que la mayoría de los alcaldes estén a favor de la consulta facilitan la labor. La insistencia de la Generalitat en reclamar la colaboración de los alcaldes desde el pasado fin de semana ha surtido sus efectos, según la información publicada. Hasta el jueves solo cinco municipios se habían negado a ceder sus instalaciones.
Aunque el contenido del formulario solicitado era idéntico en todos los casos y se detallaba el mismo plazo para devolverlo (el pasado lunes a las dos de la tarde), cada delegado ha utilizado diversas fórmulas para dirigirse a los alcaldes. Mientras Fernando Brea envía el formulario a los alcaldes apremiándoles a responder: “Para que nos lo devolváis [...] al efecto de saber qué equipamientos municipales podéis poner a disposición”, Ramon Farré se muestra más prudente: “Si así lo decidís de manera libre y voluntaria”, al igual que Juli Gendrau: “En el caso de que consideréis vuestra participación”.
Mas no participará en la campaña pero llama a votar
Mientras, en el plano institucional, el presidente catalán ha anunciado que llamará a la máxima participación de los ciudadanos en la votación del 9 de noviembre desde actos promovidos por el Govern y se desmarcará de los de CDC.
"Mantendrá una posición institucional como presidente de la Generalitat, pero esto no significa que no intervenga llamando a la máxima participación en actos que prepare el Govern", ha explicado en rueda de prensa Mercè Conesa, la portavoz de CDC, formación nacionalista que apuesta por el doble sí.
Según recoge Europa Press, miembros de la ejecutiva, alcaldes y consellers sí se implicarán en actos de campaña de la formación porque el objetivo que persiguen es movilizar al partido en favor de que el 9-N sea un éxito de participación, aunque ha declinado concretar cifra alguna.
Pacto por el Derecho a Decidir trabajará de forma unitaria
La reunión de los partidos, instituciones y entidades que forman parte del Pacte Nacional pel Dret a Decidir ha concluido hacia las 14:00 horas de este viernes con un compromiso unánime de que trabajarán "unitariamente" para lograr que el proceso participativo del 9-N tenga una participación masiva y sea un éxito.
Ha habido un "reencuentro" tras la ruptura que la semana pasada se produjo entre los partidos proconsulta, según ha manifestado este viernes en rueda de prensa desde el Parlament el coordinador del Pacte Nacional, Joan Rigol, tras reunirse dos horas y media en la cámara. Según Rigol, todos los asistentes han asegurado que el proceso participativo debe ser un éxito "pese a sus limitaciones", que trabajarán para que así sea y que, en cualquier caso, no hay que confundir unidad con uniformismo.