El voto de los emigrantes asturianos ha resultado decisivo para que el PSOE haya sumado un diputado más a los dieciséis que consiguió en las elecciones autonómicas del domingo, un escaño que le abre las puertas a un gobierno en mayoría si consigue pactar con IU y con UPyD. Esta formación, que logró un diputado, puede tener la llave de la gobernabilidad de Asturias ya que, con resultados aún provisionales, PSOE (17) e IU (5) suman los mismos escaños que tienen Foro, la formación que lidera Francisco Álvarez-Cascos (12) y que pierde uno, y el PP (10) en un Parlamento con 45 representantes. La votación ha sido muy reñida y han sido 52 votos los que le han otorgado ese escaño decisivo: el PSOE, que se había quedado en las elecciones del domingo a menos de doscientos votos de Foro para poder conseguir un tercer diputado por la circunscripción occidental, ha logrado 290 de los 573 votos recibidos por la circunscripción occidental de los asturianos residentes en el exterior. El Foro sólo ha podido sumar 44, por lo que en sufragios que ha conseguido superar hoy por un estrecho margen gracias al sufragio de los residentes asturianos en el exterior. Su único representante en el parlamento asturiano, José Ignacio Prendes, ha asegurado que su partido apoyará la formación de un Gobierno "estable" del que no formará parte tanto si opta por dar la mayoría a PSOE e IU como si decide hacerlo a Foro y PP.
El disputado voto de UPyD
En declaraciones a la agencia EFE, no ha querido pronunciarse sobre sus preferencias a la hora de definir su voto, ha subrayado que UPyD no cambiará los criterios con que concurrió a las elecciones y estará abierto al diálogo con todas los partidos políticos. Así, el dirigente de UPyD acudirá "con ánimo constructivo" a la reunión a la que ha sido convocado para el próximo viernes con el candidato socialista, Javier Fernández, el único que, por el momento, se ha puesto en contacto con el partido que lidera Rosa Díez para buscar acuerdos que garanticen la gobernabilidad.
UPyD no planteará "cuotas de poder", por lo que no entrará en el gobierno, y auguran una negociación que "no será cosmética"
El objetivo, ha subrayado Prendes, es dar a Asturias la estabilidad de la que ha carecido en los últimos meses a partir de una negociación "que no será cosmética" y en la que ha garantizado que UPyD no planteará "cuotas de poder" por lo que descarta cualquier posibilidad de entrar en el próximo gobierno sea del signo que sea. A su juicio la decisión del presidente en funciones, Francisco Álvarez Cascos, de adelantar los comicios fue "un ejercicio de irresponsabilidad" después de que Asturias "perdiera" diez meses con un Gobierno "inexistente" a pesar de que precisamente el Principado no podía permitirse esta situación. "Ahora hay que mirar hacia delante y olvidarse de las rencillas personales que han marcado la política asturiana, de forma incomprensible, en el peor momento posible", ha apuntado antes de recordar que, no obstante, UPyD también fue muy crítica con la gestión del anterior Gobierno regional, formado por PSOE, "que condujo a Asturias a una situación económica insostenible".
Prendes ha descartado también la posibilidad de que la abstención de su grupo determine un nuevo adelanto electoral, contemplado en el Reglamento de la Junta General en caso de que se repitiesen los empates en la sesión de investidura del nuevo presidente. El dirigente upedista ha concluido que el Principado necesita "un gobierno que se ponga a gobernar ya sin perder más tiempo" y ha subrayado que UPyD no admite "ansiedades ni presiones" y que afrontará las conversaciones con el resto de partidos "con absoluta serenidad pero también con absoluta celeridad y diligencia".En cuanto a la incidencia que podría tener en su decisión final el hecho de que Foro prestó a UPyD su diputado en el Congreso para poder contar con grupo parlamentario propio, Prendes ha apuntado que se trató "de un acuerdo puramente reglamentario para cumplir un trámite".
El PSOE continúa pensando en la gobernabilidad