Óscar Fernández tiró de la manta cuando fue detenido por el asesinato del pediatra Rafael Piorno en Almería. Ese drogodependiente confesó que José Javier Fuentes, un agente de Policía Nacional, planificó al milímetro el robo con violencia en la casa del médico cubano. También aseguró que el hijo futbolista fue el que le puso en contacto con su padre y le ofreció una cantidad de 25.000 euros por el asalto. Vozpópuli ha tenido acceso al sumario del caso que revela pruebas contundentes contra estos dos hombres que se encuentran en prisión provisional.
La clave para resolver el caso la proporcionó una de las vecinas del pediatra. Esta mujer declaró que le vio hablar con una persona extraña la noche del 22 de agosto, un día antes de la data de su muerte, según los forenses. Con esta manifestación, los agentes de la Guardia Civil revisaron las cámaras de seguridad de la zona, en concreto de la parte trasera de una pizzería, y dieron con este individuo.
Las cámaras de una pizzería
Este sujeto regresó a la casa de Piorno un día después para asesinarle. Los investigadores comprobaron como entró en la vivienda del pediatra. La sorpresa llegó cuando vieron que, minutos después del crimen, otro hombre también accedió disfrazado al adosado: su nombre era José Javier Fuentes. Estos dos individuos abandonaron el inmueble de forma escalonada.
Óscar Fernández usó un taser para neutralizar a Rafael Piorno, quien desconfiaba de él. Después, le asestó una puñalada en el cuello y dos o tres en el hombro. Se puso en contacto con su compinche y ambos pusieron en marcha el plan para escapar de la justicia. Este drogadicto que vino desde León para cometer el robo salió de la casa con ropa del propio pediatra.
Los investigadores de la Guardia Civil revisaron las imágenes y consiguieron atar los cabos de esta increíble historia. Óscar llegó a Almería en un autobús y fue recogido en una furgoneta que era de la pareja de José Javier Fuentes, el agente de policía. Este hombre se hospedó del 21 al 24 de agosto en el Hostal Juan de Austria de la localidad de Aguadulce. La estancia fue pagada por Myriam Haydeem, la pareja del funcionario que está investigada por su presunta colaboración en los hechos.
La gran duda ahora es qué pasará con Marcos, el hijo futbolista del agente de Policía Nacional que puso en contacto a su padre con el drogodependiente. Las pesquisas remitidas por la Guardia Civil al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Nº 1 de Roquetas de Mar cercan a este joven ya que Óscar afirma que le ofreció 25.000 euros por cometer el robo en casa del pediatra.
La confesión del drogodependiente era inevitable. Las cámaras del hostal captaron al autor confeso regresando "ensangrentado". A su salida se llevó consigo la ropa de cama. Dejó su móvil en la estancia como "medida de seguridad a efectos de no ser localizado" en el lugar de los hechos.
El autor confeso accediendo a su habitación en el hostal
Después de cometer el crimen, tanto Óscar como José Javier se desplazaron a León. La mañana del 17 de septiembre se procedió a la detención del drogodependiente en esa misma ciudad. Ese mismo día se arrestó a José Javier Fuentes en la plaza Géminis de Aguadulce, a menos de un kilómetro de la casa del pediatra.
No era la primera vez que tenían que responder ante la justicia. Óscar tenía antecedentes por apropiación indebida, falsificación de documentos de crédito, estafa, contra el derecho de los trabajadores, lesiones y robo con fuerza. El agente de Policía Nacional también contaba con arrestos anteriores por violencia de género y quebrantamiento de condena.
El autor material confesó el asesinato y detalló punto por punto todo lo que realizó. Afirmó que usaron walkie talkies para comunicarse con el policía y que toda la ropa que usó el día del crimen se la llevó este agente. No conocía Almería pero proporcionó la descripción de un local que utilizaba el ideólogo del crimen.
Óscar relató punto por punto lo que ocurrió esa tarde, sobre las 15:40 horas, en la casa del pediatra. Llegó hasta utilizar una fregona para limpiar la sangre que había. "Le proporcionó un spray para teñir de negro las cámaras de video vigilancia que había en el interior de la vivienda de la víctima y que se debían marchar de allí lo antes posible", manifestó el adicto.
La confesión del autor del asesinato del pediatra
Este sujeto afirmó que llegó al policía porque una tercera persona que le presentó a su hijo. "Le presentó al chaval llamado Marcos y éste le dijo que su padre estaba preparando un robo en el que podía ganar 25.000 euros. Que el detenido le dijo que estaba dispuesto a hacerlo, que seguidamente Marcos contactó con su padre diciéndole que ya tenía a una persona dispuesta a hacer el trabajo. Que Marcos le envió una foto del detenido a su padre para que este pudiera saber quién era en el momento de la llegada a Almería", añadió ante la Guardia Civil y apuntó que este "joven conocía lo que ocurrió" en Roquetas de Mar.
Óscar, según su relato, tenía que dirigirse al pediatra haciéndose pasar por un agricultor que había vendido una finca en Berja y que su mujer estaba interesada en esa vivienda ya que la había visto por Internet. Una treta que levantó las sospechas de Rafael Piorno. Intentó sin éxito que alguien le acompañara a esta cita. Cuando el tiempo pasaba y este individuo no apareció volvió a tener calma. Una calma que se rompió 20 minutos después cuando arrancó el macabro plan para asaltar su casa y acabar con su vida.
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