El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, solemnizará esta tarde desde el Parlament el cambio de escenario que supone el veto de la CUP a los presupuestos, que a su juicio implica romper el acuerdo de estabilidad, aunque eso no significa el fin de la legislatura ni del proceso soberanista. También ha afirmado que supone "un punto de inflexión y tendrá consecuencias", que no se venderán a nadie y que están trabajando para la independencia.
Según fuentes consultadas por Efe, el presidente catalán tiene previsto comparecer ante el pleno del Parlament esta tarde, justo antes o a continuación de la votación de las enmiendas a la totalidad de la oposición, incluida la CUP. Fuentes cercanas al president certifican que el acuerdo de estabilidad entre Junts pel Sí y la CUP, por el que el mismo Puigdemont llegó a la presidencia tras la retirada de Artur Mas, está roto. Sin embargo, esto no significa necesariamente que finalice la legislatura, puesto que Puigdemont no tienen en mente un escenario de convocatoria electoral, según las mismas fuentes.
"Estamos aquí para alcanzar la independencia", ha señalado Puigdemont, según fuentes del grupo
Puigdemont, el vicepresidente y conseller de Economía, Oriol Junqueras, y el resto de miembros del Govern se han reunido durante unos 20 minutos con el grupo de Junts pel Sí en el Parlament, antes del inicio del pleno en el que no prosperarán los presupuestos por la enmienda a la totalidad de la CUP y el resto de grupos de la oposición, lo que abre un escenario de incertidumbre en Cataluña.
"Sí hubo negociación"
Así, la reunión, prevista antes de saber si la CUP retiraba la enmienda a la totalidad, habría servido para analizar la situación y hacer piña dentro de Junts pel Sí en un momento crítico. En la cita se ha constatado la "unidad" en Junts pel Sí en defensa de la labor negociadora con la CUP, se ha rebatido la acusación de los antisistema de que no hubo negociación y se ha recordado que en total se celebraron 16 reuniones formales sobre Presupuestos. Ante sus compañeros de Junts pel Sí, Puigdemont ha subrayado que el veto de la CUP supone un "punto de inflexión" en la hoja de ruta soberanista pero el Govern no se "venderá a nadie": "Estamos aquí para alcanzar la independencia", ha señalado, según fuentes del grupo.
La reunión se ha producido produce después de que ayer el Consejo Político de la CUP decidiese mantener su enmienda a la totalidad a los Presupuestos de la Generalitat de 2016, que se debatirán en el pleno del Parlament, por lo que no prosperarán debido al veto del socio parlamentario del Govern. Al encuentro han asistido todos los miembros del ejecutivo catalán, así como los 62 diputados de Junts pel Sí, incluida la presidenta del Parlament, Carme Forcadell.