La Fiscalía Superior de Cataluña ha pedido al Tribunal Superior de Justícia de Cataluña (TSJC) admitir a trámite una querella contra la exconsellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés, y el exdirector del Servicio Catalán de la Salud, Adrià Comella, por el retraso en la vacunación de los agentes de la Policías Nacionales y la Guardia Civil destinados en Cataluña.
En un informe, el Ministerio Fiscal ha explicado que entre finales de febrero y finales de abril de 2021 hubo "inactividad, retraso o falta de iniciativa" por parte de la conselleria de Salud a la hora de cumplir con el Plan Nacional de Vacunación de Covid con los miembros de la Guardia Civil y la Policía Nacional destinados en Cataluña.
En una querella, presentada en abril por la Unión de Oficiales de la Guardia Civil Profesional, se atribuye a los querellados los "delitos de prevaricación administrativa dolosa, contra los derechos de los trabajadores, contra los derechos fundamentales y libertades públicas y contra las garantías constitucionales".
Conducta "intencionada y arbitraria"
Han asegurado que Vergés tuvo una conducta "intencionada y arbitraria" al paralizar la vacunación de dichos cuerpos, y a Comella le imputan el haber comunicado el 8 de abril de 2021 la orden de suspensión de la vacunación de los colectivos.
Según la fiscalía, existió "una diferencia de trato injustificada y discriminatoria respecto a esos cuerpos nacionales en relación con los cuerpos policiales y de emergencias autonómicos y locales --Mossos d'Esquadra y Policías Locales--, a los que se vacunó de manera más rápida y eficiente".
En el informe, no descartan que también se pueda investigar al actual conseller de Salud, Josep Maria Argimon, que entonces era secretario de Salud Pública, y al director de servicios de CatSalut, Xavier Rodríguez.
