La Diada ha comenzado este domingo como se esperaba: con tensiones, reproches, protestas, pitadas y abucheos. La explicación es sencilla: diversos sectores del secesionismo consideran que ERC, el partido que gobierna la Generalitat en coalición con JxCat, "no trabaja por el independentismo" con su apuesta por la mesa de diálogo con Sánchez. Los republicanos mantienen, a su vez, dos contiendas: por un lado, contra sus socios, JxCat; y por otro, contra la ANC, la entidad independentista que organiza desde 2012 la principal manifestación de la Diada.

Este contexto ha condicionado la Diada de este 11 de septiembre desde la pasada madrugada. Al filo de la medianoche, en el Fossar de les Moreres, un enclave emblemático para el independentismo durante la Diada, varias de las personas concentradas recibieron a la comitiva de ERC, encabezada por su secretaria general, Marta Vilalta, con pitos, insultos y gritos de "botiflers" (traidores). Lejos de evitar este enfrentamiento, Vilalta respondió provocativa: "Podéis gritar, gritad más si os parece. Venga, que no os oímos. Porque mientras vosotros gritáis, nosotros, la gente de ERC, trabajaremos para llevar a este país a la libertad".

Pitadas y reproches en la ofrenda floral

Con menos tensión, pero con el mismo ambiente de crispación se ha celebrado a primera hora de esta mañana las ofrendas al monumento a Rafael Casanova. Ahí, de nuevo, decenas de independentistas concentrados en los aledaños han abucheado y pitado a diferentes partidos. Según Efe, la intensidad de la pitada ha subido el turno de la comitiva de ERC, encabezada por Oriol Junqueras y Marta Vilalta, junto a Ernest Maragall y consellers como Josep Gonzàlez-Cambray o Teresa Jordà.

Durante la ofrenda, el líder de la oposición en Cataluña, Salvador Illa, ha deseado que la jornada se celebre con "respeto" y ha reclamado al Govern de coalición que deje de lado sus peleas "internas" y se centre en los problemas de los ciudadanos de Cataluña. En este sentido, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha lamentado que el curso político en Cataluña haya arrancado "demasiado marcado por las peleas entre los partidos del Govern".

Por su parte, Aragonès, por su parte, ha mostrado su deseo de que, en la celebración de la Diada, la ciudadanía "se exprese con toda su pluralidad y convicciones" y que "se enfoque claramente las reivindicaciones" a favor de un referéndum de autodeterminación.

Según RTVE, los reproches también han ido dirigidos hacia la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, por el caos en Rodalies tras la avería que dejó a Cataluña sin servicio durante horas el pasado viernes.

La plana mayor de ERC también ha sido señalada durante en Arc de Triomf, donde Òmnium Cultural ha celebrado otro acto con la presencia de los republicanos. En los aledaños, activistas secesionistas han repartido carteles con lemas como 'Botiflers, ni aquí ni en Madrid', 'Botifler, yo no te votaré' o 'Govern: DUI o dimisión'. Fuentes de ERC consultadas por Efe han restado importancia a estos abucheos e insultos, unas expresiones que han atribuido a "una minoría" que "no es representativa del movimiento independentista".

¿Temor a una desmovilización?

A lo largo de la mañana, han sido numerosas las llamadas a la movilización. Tanto la ANC como Òmnium Cultural han llamado a participar en los distintos actos y manifestaciones de la Diada para demostrar la fuerza del independentismo. En esta misma línea, la presidenta de JxCat, Laura Borràs, ha hecho otro llamamiento a la "movilización" en la calle al considerar que la Diada "es un día de reivindicación y también de esperanza".

Cabe recordar que en los últimos años ha caído de forma considerable la participación en la manifestación principal, que convoca la ANC.

Abucheos al PP y una denuncia de la ANC

El presidente del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Josep Bou, también ha sido abucheado cuando realizaba una ofrenda floral en nombre del Partido Popular en el monumento de Rafael Casanova. Como ya hiciera en anteriores años, Bou ha participado primero en la ofrenda floral del Ayuntamiento de Barcelona, con la alcaldesa Ada Colau a la cabeza y representantes de todos los grupos; pero dos horas más tarde ha llevado a cabo una segunda ofrenda, con algunos concejales y militantes populares, en nombre de esa formación, apunta Efe.

En esta jornada, la ANC también ha denunciado que la fachada de su sede en la calle Marina de Barcelona ha amanecido este domingo con cuatro banderas españolas pegadas en el cristal. "Así se despierta la sede nacional de la ANC. Por mucho que lo intenten, no conseguirán hacernos callar. ¡Saldremos a la calle y ganaremos!", ha escrito la entidad en su cuenta de Twitter.

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