El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, defenderá este miércoles el acuerdo de gobierno sellado con el PSOE la pasada semana y hará un sonoro llamamiento a los populares a sumarse al mismo. El líder de C's insistirá en la necesidad de contar con los 7 millones de votantes del PP para acometer las grandes reformas del Estado y a ello dedicará mayor energía que el candidato socialista, Pedro Sánchez, que sólo tendió la mano a los populares en este sentido en un ligero pasaje de su discurso de investidura. Rivera irá más allá que su socio al abrir la puerta al PP a un "gobierno de constitucionalistas" (con el PSOE y su partido). Así, según avanzan fuentes del grupo parlamentario de C's a Vozpópuli, pondrá en valor las políticas consensuadas con los socialistas y los esfuerzos realizados por ambos partidos "frente al bloqueo que promueven otros".
Sin embargo, tal defensa del pacto, apuntan las mismas fuentes internas, "no implicará salir al rescate" de la figura de Sánchez, cuando él mismo dejó entrever este martes que su investidura está muy difícil. Ello no quita, añaden, que Rivera le dedique algún halago por haber arrimado el hombro al entendimiento. En C's no quieren que el eventual fracaso de Sánchez en la votación definitiva del viernes se vuelva en contra de la formación naranja y suponga un lastre para futuros episodios, incluyendo la convocatoria de nuevas elecciones. Sobre todo, después del amplio pacto alcanzado (con más de 200 puntos) y de las concesiones realizadas en materia económica, por ejemplo, en lo relativo al 'contrato único', una de las medidas estrella del programa electoral. Por ello, Rivera tratará este miércoles de marcar una línea divisoria entre las reformas suscritas con los socialistas, "perfectamente viables" y para las que exigirá el apoyo del PP, y las opciones del candidato Sánchez, que ya resta importancia a una derrota el 4-M y da las gracias a los suyos por haber "cumplido la tarea" tras el encargo de Felipe VI.
En C's no quieren que el eventual fracaso de Sánchez en la votación definitiva del viernes se vuelva en contra de la formación naranja
"Rivera no hará de portavoz de Sánchez, sino de presidente de C's, el único partido capaz de poner de acuerdo a PP y PSOE", recalcan dichas fuentes más gráficamente. Es por ello, por lo que el líder naranja mirará en buena parte de su intervención a la bancada popular, reclamando a los diputados del PP que sean valientes y permitan que haya gobierno en España por encima del interés personal de Rajoy, del que recordará que "perdió su oportunidad". PP y C's tienen ya fijadas reuniones para la próxima semana. Asimismo, Rivera, según ha podido saber este diario, atacará al jefe del Gobierno en funciones por su inmovilismo, por su inacción "para que nadie cambie" y le pedirá que deje paso en su partido al "no estar legitimado para abanderar una nueva etapa de regeneración democrática".
En este contexto, Rivera cercará también al máximo dirigente del PP por el flanco de la corrupción e intentará ser aquí más incisivo que Sánchez en su discurso de este martes. El aspirante socialista no hizo referencia, por ejemplo, a los recientes coletazos del caso Taula en la Comunidad Valenciana o de la Púnica en Madrid. "No voy a entrar en el 'y tú más", se limitó a decir Sánchez.
Los estrategas de C's han reparado en que Rivera hablará en esta segunda jornada de investidura por detrás de Rajoy, y del líder de Podemos, Pablo Iglesias, en sus réplicas a Sánchez. De este modo, para entonces, la lucha contra la corrupción ya habría sido puesta sobre la mesa como tema capital, sobre todo por cuanto está afectado al PP en estas últimas semanas. Además, el presidente de Ciudadanos tendrá aquí oportunidad de destacar la medidas anticorrupción que forman parten del acuerdo de El Abrazo, entre ellas la "supresión del aforamiento de diputados, senadores y miembros de las Asambleas Legislativas de las Comunidades Autónomas". Aquí, las fuentes citadas señalan que Rivera previsiblemente aludirá a la situación de la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá, ahora senadora, que se niega a renunciar a su aforamiento para no ser investigada por el Tribunal Supremo en el marco de la operación Taula.
Lealtad frente a los últimos guiños a Podemos
Además, en su réplica a Sánchez, Rivera hará hincapié en que la supresión de las diputaciones provinciales es un punto esencial del pacto ya firmado para un gobierno progresista y reformista. El líder de C's destacará que es algo irrenunciable y que fue una de las principales condiciones planteadas al PSOE, finalmente aceptada. La formación naranja dejará claro que estará muy vigilante de que tal medida sea respetada por Sánchez y abordada en los tres primeros meses de un eventual Ejecutivo. La confesión del candidato socialista este lunes, admitiendo en el Comité Federal (a puerta cerrada) que no es partidario de eliminar las diputaciones, y el olvido de citar tal medida en su discurso del día siguiente obligan a Rivera a ser aquí contundente. De momento, desde C's restaron ayer importancia a dicha omisión en la exposición de Sánchez. De igual modo, el presidente de Ciudadanos demandará lealtad a Pedro Sánchez después de los últimos guiños a Podemos y sus alianzas, sobre todo en gasto social, y le exigirá no caer en contradicciones que puedan contravenir el acuerdo de investidura.
