La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha decidido que "no procede validar" la subasta eléctrica realizada ayer ante "la concurrencia de circunstancias atípicas y en un contexto de precios elevados en el mercado diario durante las semanas previas", informa Efe.
La subasta celebrada ayer arrojó un incremento del coste de la energía del 25,6%, lo que supondría un alza en la tarifa final del 10,5%. En un comunicado, el regulador señala que desde hace cuatro años ha recomendado cambiar el esquema de subasta.
En la jornada del jueves, el impacto fue brutal al saberse que la subasta eléctrica había arrojado una subida de la electricidad próxima al 30%. Teniendo en cuenta la ponderación entre los peajes (parte regulada de la factura) y el precio libre de la luz, el encarecimiento de la factura a pagar por los ciudadanos en enero sería superior con toda seguridad al 12%. El Gobierno ha tenido que moverse rápidamente para evitar la situación de indefensión de los ciudadanos y ya este jueves avisó de que había posibilidades de suspender la subasta teniendo en cuenta las circunstancias atípicas que siempre se producen en ella: los que compran y los que venden son los mismos.
"Espero y deseo que (este repunte) sea frenado", declaró el ministro José Manuel Soria, que consideró "inaceptable" el encarecimiento de la subasta Cesur. La tarifa eléctrica de último recurso o TUR, que a partir de enero se denominará precio voluntario al pequeño consumidor, está formada por dos elementos, los peajes y el coste de la energía, que representan alrededor de la mitad de la factura cada uno, y a los que se suman los impuestos. Los peajes los fija el Gobierno a través de una orden ministerial y sirven para retribuir todas las actividades reconocidas al sistema.
La otra parte, el coste de la energía, se decide en estas subastas trimestrales Cesur.
Éste ha sido el comunicado de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia.