La sesión de control al presidente valenciano, Ximo Puig, ha dejado claro que el fantasma del adelanto electoral está sobrevolando por las sedes de los diferentes partidos. Hoy ha sido la secretaria general del PPCV, María José Catalá, quien le ha pedido a Puig que adelante ya las elecciones autonómicas ante los anuncios y decisiones erróneas que, a su juicio, está tomando y que perjudican a los valencianos.
Catalá ha criticado que Puig va "como pollo sin cabeza" y que la reforma fiscal es un perfecto ejemplo de ello. La número 2 de Carlos Mazón se ha hecho eco de la información avanzada ayer por Vozpópuli en la que se informaba de que el Gobierno valenciano ya tenía listos todos los requisitos para celebrar las elecciones autonómicas, proceso que había culminado con una orden para informar de las características de sobres y papeletas para esa cita.
"Como ya tiene la maquinaria electoral preparada no nos lo haga largo", le ha rogado Catalá al jefe del Consell que no ha querido dar pistas ni a la oposición ni a sus socios de Gobierno de qué decisión va a tomar, aunque sigue insistiendo que su hoja de ruta es agotar la legislatura.
Fuentes de Compromís, principal socio de legislatura de Puig, han confirmado a Vozpópuli que pese a que Puig afirma en las reuniones internas que quiere acabar el mandato existe "incertidumbre" por si finalmente decidiera realizar ese adelanto de las elecciones autonómicas. La cita con las urnas debería tener lugar en abril y, en principio, está previsto hacerlas coincidir con las municipales del próximo mes de mayo.
Calibrando apoyos
En términos electorales la coalición nacionalista no cree que le afectara de manera significativa ese adelanto electoral. Las fuentes consultadas afirman que Puig está haciendo "prospecciones demoscópicas" muy elevadas cuantitativamente para calibrar cuál es el grado de apoyo en estos momentos del PSPV y si la suma con sus actuales socios de Gobierno le permitiría afrontar un tercer mandato.
La situación económica que apunta a una desaceleración en la Comunidad Valenciana, en consonancia con el resto de España; la evolución judicial del caso Azud que investiga la financiación ilegal del PSPV, así como el de Mónica Oltra; y la determinación de no ir a las urnas junto a Pedro Sánchez en un hipotético superdomingo electoral, son las otras claves que determinarán finalmente la decisión de Puig, según las mismas fuentes.