Miles de personas han asistido este jueves a sendas manifestaciones en Barcelona y en Madrid en defensa de la unidad de España y de la Constitución, y en contra del reto secesionista impulsado por el presidente catalán, Artur Mas, coincidiendo con el 34 aniversario de la Carta Magna, según recoge Efe.
El Movimiento Cívico de España y Catalanes, con el apoyo de once colectivos cívicos y tres partidos -PPC, Ciutadans y UPyD-, ha organizado una manifestación inédita en Cataluña que ha arrancado en la plaza de Urquinaona de Barcelona y ha finalizado en la plaza de Sant Jaume, frente a la Generalitat. Según la Guardia Urbana, a la manifestación ha acudido unas 7.000 personas, que enarbolaban banderas que conjugaban las barras de la española con las de la catalana, mientras que los organizadores han elevado la cifra de participantes a varias decenas de miles.
En paralelo, la Asociación para la Defensa de la Nación Española (DENAES) ha reunido este mediodía a miles de ciudadanos en la madrileña Plaza de Colón para reivindicar "la defensa de la unidad de España" desde todas las "posiciones ideológicas", porque "España somos todos", según reza su manifiesto. La mayoría de los participantes en el acto celebrado en Madrid llevaban banderas españolas y catalanas, así como pancartas en las que se podía leer "Los nacionalismos dividen y enfrentan" o "Barça+Madrid+otros=La Roja".
En Barcelona, el lema principal de la protesta se ha exhibido en una pancarta en la cabecera de la manifestación que rezaba "España somos todos", detrás de la cual han marchado, entre otros, seguidores de asociaciones cívicas catalanas que han dado su apoyo, como Impulso Ciudadano, Asociación por la Tolerancia, Foro España, Convivencia Cívica, Cataluña Tal Cual o Ágora Socialista.
También han acudido el líder del PPC en Barcelona, Alberto Fernández Díaz, los concejales de este partido Xavier Mulleras, Eduardo Bolaños y Oscar Ramírez, así como los diputados populares en el Parlament José Antonio Coto, Pedro Chumillas y Sergio Santamaría, además de la vicesecretaria del PPC Andrea Levi. A la protesta también han asistido el líder de Ciutadans, Albert Rivera, y el máximo dirigente de UPyD en Cataluña, Ramón de Veciana.
En otras pancartas de la manifestación se ha podido leer lemas como "Por una Constitución de todos" y "Cataluña con la Constitución".
Banderas catalanas y españolas en Barcelona
Las banderas españolas y catalanas han inundado finalmente la plaza de Sant Jaume, en donde los manifestantes han pedido la dimisión del presidente catalán, quien adelantó las catalanas con el objetivo de que Cataluña se convirtiese en un Estado en la UE.
Representantes del Movimiento Cívico de España y Catalanes han leído un manifiesto en el que se ha defendido la unidad como "la mejor garantía para su pluralidad interna y fundamento de la solidaridad entre los ciudadanos y sus diferentes comunidades". El manifiesto considera "el derecho a decidir un eufemismo que pretende edulcorar un inexistente derecho a la secesión".
El presidente del Movimiento Cívico de España y Catalanes, Manel Parra, ha afirmado que el objetivo es "expresar con naturalidad que somos catalanes y españoles" y recordar que "cuando se votó la Constitución, se hizo favorablemente más en Cataluña que en el resto de España", dato que refleja el apoyo a la Carta Magna.
En paralelo, miles de personas se manifestaban en Madrid para defender la unidad de España frente al reto secesionista impulsado por el presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, y en coincidencia con la celebración del 34 aniversario de la Constitución española de 1978.
En la concentración en la plaza de Colón de Madrid, organizada por DENAES para reivindicar "la defensa de la unidad de España", la mayoría de los participantes han portado banderas españolas y catalanas. Durante el acto, al que han asistido el vicepresidente del Parlamento Europeo Alejo Vidal-Quadras y el eurodiputado del PP Carlos Iturgáiz, se ha entonado el himno nacional de España al que ha puesto letra el escritor Jon Juaristi.
El presidente de DENAES, Santiago Abascal, que ha cerrado el acto, ha reclamado insistentemente la unidad de España porque este país "es una gran nación" que no puede ser dividida ni fragmentada porque la soberanía nacional pertenece al pueblo español.