El Ministerio de Asuntos Exteriores, que dirige Arancha González Laya, considera que los representantes de Podemos que viajaron a Bolivia para seguir las elecciones presidenciales del pasado domingo sufrieron una "campaña de acoso" que les obligó a realizar la observación electoral con "limitaciones", según desvelaron fuentes diplomáticas a Vozpópuli.
El departamento de Laya critica, en concreto, la "connivencia" del periódico digital 'OkDiario' con el Gobierno interino boliviano de Jeanine Áñez. Los observadores de la formación morada tuvieron "limitaciones" en su trabajo electoral en La Paz.
Al país andino viajaron como invitados del Tribunal Superior Electoral de Bolivia (TSE) cuatro diputados de Podemos: Gerardo Pisarello, Lucía Muñoz, Teresa Mola y Francisco José Pérez. "Su llegada a La Paz fue precedida por una campaña de acoso por parte de un diario digital español, en connivencia con este Ministerio de Gobernación", transmitió la Embajada española a Madrid en un cable diplomático al que tuvieron acceso las citadas fuentes.
"Su titular emitió comentarios incendiarios alertando de la llegada de españoles y argentinos que vienen a desestabilizar el país y que encontrarán por ello la cárcel'", se subraya desde Exteriores. Se da la circunstancia de que el ministro boliviano de Gobierno, Arturo Murillo, fue destituido por Áñez al día siguiente de los comicios.
Sobre el trabajo de los parlamentarios de Podemos en La Paz, el Gobierno español estima que "afortunadamente" pudieron ejercer su labor de observadores, "aunque con limitaciones". En este sentido, los cuatro diputados tuvieron la oportunidad de reunirse con miembros de la misión de expertos de la UE y de las Naciones Unidas, "y conversar sobre los pormenores del proceso electoral y sobre el apoyo que ha prestado la comunidad internacional al fortalecimiento del órgano electoral plurinacional".
El encargado de negocios al frente de la Embajada española, Javier Gassó, admitió en su telegrama que la jornada electoral "transcurrió en un ambiente de calma y de forma ordenada". Además, la participación de las Fuerzas Armadas en el proceso, "como custodio de los centros de votación y material electoral", había sido muy criticada por los dirigentes del Movimiento al Socialismo (MAS) que dirige Evo Morales, pero la presencia de los militares "fue limitada y discreta y en ningún caso llegó a resultar intimidatoria para los votantes".
Dos equipos españoles de observadores
La propia representación diplomática española tuvo la oportunidad de participar en el ejercicio de acompañamiento de la observación internacional "con dos equipos", que visitaron un total de ocho recintos electorales. Mientras, Gassó acudió a última hora a la sede del TSE para felicitar a este organismo por el "éxito" de la jornada electoral.
Si bien el despliegue de observadores de Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales como la UE (Unión Europea) o la OEA (Organización de Estados Americanos) fue "modesto", hubo un equipo de vigilancia apoyado por la cooperación española -Observa Bolivia- que contó con más de 2.000 observadores.
"Su informe preliminar confirma que la jornada discurrió con plena normalidad y de acuerdo con los estándares internacionales, más allá de algún incidente menor y aislado", concluyó el diplomático español.
