Nuevas revelaciones del sumario del 3 por ciento en Cataluña. Según consta en las actuaciones de esta causa de corrupción, un empresario donante de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) ha narrado ante los fiscales Anticorrupción José Grinda y Fernando Bermejo cómo fue el propio expresidente de la Generalitat, Artur Mas, quien en una reunión le dejo claro que "a partir de ahora todas las adjudicaciones han de ser a través de Germà Gordó".
En su declaración, a la que ha tenido acceso Vozpópuli, este testigo protegido explica que en el año 2006-2007 recibe una llamada del ex conseller de Justicia de la Generalitat, Germà Gordó, quien se pone en contacto con él para mantener una reunión en la sede de Convergencia. Cuando el empresario –que ya había hecho previamente donaciones a la Fundación Catdem, satélite de CDC- llegó al edificio de la calle Córcega de Barcelona fue conducido al despacho de Mas donde también se encontraba su mano derecha, Gordó.
En ese momento, el ex presidente de la Generalitat y ex líder de CIU le dio una orden clara: "A partir de ahora todas las adjudicaciones han de ser a través de Germà Gordó". Fuentes de la investigación consultadas por este periódico consideran este testimonio de gran valor probatorio y muy revelador de cómo actuaban los pesos pesados de CDC a la hora de conseguir adjudicaciones y de cómo eran las "presiones" que recibían presuntamente los empresarios que competían por las adjudicaciones de grandes obras públicas en Cataluña. También reforzaría la tesis de los investigadores de que Artur Mas estaba al tanto de que en su partido existía financiación ilegal o Caja B.
El papel clave de Gordó
Asimismo, el constructor –cuya identidad permanece en el anonimato debido a su condición de testigo protegido en esta causa- pone de manifiesto que debido a que él hacía donaciones "sin connotaciones políticas" Gordó le dijo que "debía cambiar" aunque el testigo, siempre según su versión prestada en sede judicial, "no le hizo caso".
De la investigación del caso del 3 por ciento se desprende que tanto la Guardia Civil, como la Fiscalía Anticorrupción y el juez de El Vendrell (Tarragona) Josep Bosch Mitjavila otorgan un papel preponderante al actual diputado del Parlament, Germà Gordó, en la trama corrupta.
Fuentes de la investigación consideran este testimonio de gran valor probatorio y muy revelador de cómo actuaban los pesos pesados de CDC a la hora de conseguir adjudicaciones
Gordó –que es aforado ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC)- habría tenido un "poder decisorio" y "autoridad" tanto en la "gestión administrativa como económica del partido Convergencia Democrática de Cataluña", donde ostentaba el cargo de gerente, como en las "fundaciones vinculadas al mismo que sustentan económicamente y son el principal recurso económico de dicho partido, principalmente Catdem (Antigua Fundació Trias Fargas), y Fundació Fórum Barcelona".
Sin embargo, todos estos "indicios" ya fueron enviados por el instructor en una exposición razonada al TSJC, órgano que rechazó, por el momento, abrir una investigación penal al diputado de Junts Pel Sí. El ex conseller ha defendido siempre su inocencia.
