Hace tres meses que Enrique López López firmó su último auto como ponente en la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. En ella, acordó la extradición del exmagistrado peruano César Hinostroza, pero solo por los delitos de tráfico de influencias y patrocinio ilegal y no por el de organización criminal -como pedía el país sudamericano-, lo que generó gran polémica al otro lado del Atlántico. Ahora, firmará disposiciones y políticas de gobierno de la Comunidad de Madrid, donde acompañará a Isabel Díaz Ayuso al frente la Consejería de Justicia.
En vísperas de la toma de posesión de la líder del Partido Popular se dio a conocer el fichaje de López, quien también se hará cargo de las funciones de Interior, hasta ahora asumidas por la Consejería de Presidencia, y la gestión de "Víctimas del Terrorismo".
López llega a la Comunidad de Madrid tras décadas de carrera en la Administración de Justicia. Una carrera impulsada en 2001 por el propio PP, que le propuso para vocal y portavoz del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), con un breve paso por el Tribunal Constitucional (2013-2014), del que tuvo que dimitir tras ser interceptado por conducir su moto a alta velocidad, sin casco y cuadriplicando la tasa de alcoholemia permitida. En su trayectoria en la Audiencia Nacional, en la que ha sido magistrado de la Sala de lo Penal y más recientemente de la sala de apelaciones, tuvo que ser apartado de los tribunales de los casos Bárcenas y Gürtel después de que las acusaciones solicitaran su recusación por su afinidad mostrada respecto al PP.
Extradiciones y falsificaciones
En los 11 años que ha permanecido en la Audiencia Nacional ha sido ponente de 131 resoluciones, entre autos (37) y sentencias (94). La primera y la última han sido vinculadas a extradiciones; 33 resoluciones en total entre las que destacan la no entrega de Claudia Patricia Díaz Guillén, enfermera del presidente fallecido de Venezuela Hugo Chávez y extesorera del Gobierno bolivariano.
El 3 de noviembre de 2008, el magistrado firmó su primer auto en la sede judicial de la madrileña Plaza Villa de París junto a Fernando García Nicolás, quien ejerció de presidente del tribunal, y Julio de Diego, conocido por ser el juez que forzó que Mariano Rajoy testificara en el caso Gürtel. Aquel día acordó la entrega de un ciudadano rumano a las autoridades de ese país, que le reclamaba por un delito de robo con fuerza por los hechos cometidos dos años antes en una tienda.
El primer semestre de 2009 López redactó varias sentencias contra diferentes miembros de una banda china por delitos continuados de falsificación de moneda y de estafa en concurso ideal, así como falsificación de documentos oficiales y mercantiles. La mayor parte de 2010 se dedicó a casos de tráfico de drogas, blanqueo de capitales, falsificación de monedas y estafas.
ETA y yihadismo
El 28 de julio de ese año firmó su primer gran fallo: condenó a 30 años de prisión al etarra Javier Abaunza por un delito de asesinato terrorista contra del magistrado del Tribunal Supremo Rafael Martínez Emperador. Fue la primera de 30 sentencias que López dictó sobre terrorismo en la Audiencia Nacional.
"No cabe duda de que el atentado [que tuvo lugar el 10 de febrero de 1997] fue ordenado por dirigentes de la banda terrorista ETA, puesto que fue reivindicado por la propia organización", esgrimió. El acusado mantuvo su negativa a declarar en todo el procedimiento, pero el tribunal finalmente concluyó que no cabía duda de su pertenencia a la organización, ni de su vinculación al comando.
El 25 de noviembre de 2009, el juez dictó su segunda sentencia sobre terrorismo. Esta vez, por un delito de daños terroristas. López fue ponente del fallo en el que se condenó a cinco años de prisión al responsable de los ataques a la Subdelegación del Gobierno en Álava.
Siete meses después, fijó una pena de nueve años de prisión a un miembro de ETA por un delito de tenencia de explosivos. Según consta en la sentencia, a la que ha tenido acceso Vozpópuli, facilitó 1.638 kilogramos de la sustancia explosiva cloratita, 100 kilogramos de dinamita goma, 600 gramos de amonita. "Ambas cargas llevaban listo el sistema de ignición, para cuya activación bastaba la conexión de los detonadores", explicó el juez.
Aunque empezó con casos de terrorismo vinculados a ETA, su última sentencia en esta materia versa sobre yihadismo y estrategias de propaganda del DAESH en redes sociales
En julio de 2010 también condenó a cuatro acusados como autores criminalmente responsables de un delito de incendio terrorista en grado de tentativa ya definido a la pena de siete años, seis meses y un día de prisión. En la misma sentencia les absolvió de los delitos de integración en organización terrorista y otro de tenencia de aparatos y sustancias incendiarias y explosivas. Días después acordó penas para otros dos hombres por enaltecimiento al terrorismo.
En los últimos 11 años López ha firmado 36 resoluciones, seis de ellas autos, sobre terrorismo. Aunque empezó fallando en casos vinculados a ETA, su última sentencia en esta materia versaba sobre yihadismo y estrategias de propaganda del DAESH en redes sociales. "En la sentencia recurrida se declara
probado que el acusado viajó hasta en dos ocasiones a Turquía con la intención de atravesar la frontera con Siria y, una vez allí, poder llevar a término la actividad terrorista que ensalzaba y a la que alentaba desde España", aseguró el juez en el escrito del 19 de marzo de este año.