Pedro Sánchez tiene en mente que el 'no' de ERC a los Presupuestos de 2019 tras la moción de censura hizo caer a su Gobierno. Pero ahora la coyuntura es otra, con la gestión de la pandemia como prioridad y la llegada de los fondos de la Unión Europea. Los independentistas catalanes, que hasta la fecha eran más favorables a una abstención, están dispuestos a votar 'sí' a la cuentas públicas si de este modo Ciudadanos se aparta de la ecuación.
"Dar una buena respuesta a los momentos duros que atraviesa Cataluña en ningún caso se puede dejar en manos de Ciudadanos", explican desde ERC. Si este martes, el portavoz de la formación nacionalista en el Congreso, Gabriel Rufián, dejaba a entender que están más cerca a "apoyar" los Presupuestos que de la abstención, desde Barcelona ratificaban esta posición.
Se trata de una cuestión que ha generado tensiones internas, ya que la inminencia de elecciones en Cataluña, previstas para el 14 de febrero, siempre dificultan la entente de los de ERC con Madrid. Pero los de Oriol Junqueras ya han pergeñado su argumentario para neutralizar las críticas del partido de Carles Puigdemont: el contexto inédito de crisis económica obliga a gestionar el "mientras tanto" sin renunciar a la independencia como meta final.
"Mientras tanto"
Precisamente esta apelación a la gestión diaria, al "mientras tanto", la usaban de forma prácticamente sincronizada Rufián, desde el Congreso, y Sergi Sebrià, diputado en el Parlament, para justificar su alineamiento sin matices con el bloque de investidura: "Hay un mientras tanto entre tus fines, tus sueños, y el día a día, y este mientras tanto hay que gestionarlo y eso no nos hace menos independentistas sino más útiles", decía Rufián.
En la misma línea Sebrià hablaba de este "mientras tanto" para atajar los "momentos duros" que vive la sociedad catalana debido a la pandemia al tiempo que no renunciaba a la independencia en el largo plazo: "ERC se mantiene inmóvil en el objetivo último de la república catalana". Se trata de una posición que cuestionan las bases de ERC que, en conversación con Vozpópuli, creen que el propósito de su formación en Madrid debería ser "abordar el reconocimiento del derecho de autodeterminación y el fin de la represión". "El papel de ERC no debe ser el peix al cove [expresión sobre el pragmatismo del que presumía la extinta CiU] sino la independencia", remachan estas fuentes.
La dirección de ERC, sin embargo, tiene otros planes. Será el consejo nacional de ERC quien deberá tener la última palabra sobre el sentido del voto, pero si no hay incumplimientos de última hora por parte del PSOE, avalarán la propuesta de cuentas públicas. Además, su apoyo serviría para reforzar el "bloque de investidura" ante los amagos de los de Inés Arrimadas de obligar a Pedro Sánchez a elegir "entre la moderación" o Unidas Podemos y sus aliados.
"Preacuerdo"
En los próximos días se irán conociendo más detalles de estos "preacuerdos" entre ERC y el Ejecutivo central. De momento, los principales puntos de acuerdo son en materia de autónomos, con el compromiso de ampliar la moratoria del pago de las cotizaciones en la Seguridad Social hasta marzo de 2021, un trimestre más, y con la opción de ampliarlo en función de las circunstancias.
La "creación de un comité bilateral para una reforma fiscal total, justa y progresiva" que finalice con la baja fiscalidad -"paraíso fiscal", lo llamó Rufián- en la Comunidad de Madrid, la "liquidación de la deuda existente del ministerio de Educación para con la Generalitat" en materia de becas escolares y, por último, el "fin del control financiero" que existe desde el año 2015, con la ley de estabilidad presupuestaria de Cristóbal Montoro, que ha Rufián bautizó como "el fin de una etapa negra".
