El principal investigado por la desaparición y muerte de Esther López realizó declaraciones contradictorias y también intentó ocultar sus desplazamientos el mismo día en el que presumiblemente falleció su amiga. Ese día, el 13 de enero, este hombre viajó dos veces hasta su vivienda en la urbanización El Romeral de Traspinedo para los cuales puso el modo avión en su teléfono y dejó su terminal móvil en casa.
Así se desprende de un informe del equipo de investigadores del caso de la Guardia Civil, que lo componen agentes de la Policía Judicial de Valladolid y de la Unidad Central Operativa (UCO), a los que ha tenido acceso Vozpópuli. Este oficio fue presentado ante la juez del Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid que se encarga del caso.
Una vez conocidas las diligencias, las sospechas de los agentes se centraron en las informaciones referentes a Óscar S.M., el último amigo que vio con vida a Esther la noche de su desaparición. No obstante, no descartan la participación en los hechos de terceras personas que aún no han podido ser identificadas.
El abrigo tenía desgarros
Las conclusiones preliminares del informe policial atestiguan que fue una muerte violenta y sospechosa de criminalidad. Los daños son compatibles con un atropello pero no se descartan la confluencia de otros factores.
Este supuesto atropello se produjo a baja velocidad lo que supondría que el coche implicado no tendría "desperfectos visibles" debido a la restitución o elasticidad de los materiales. Sin embargo sí que se podrían haber producidos daños internos en la carrocería. El abrigo que portaba la víctima tenía tres roturas compatibles son desgarros y en su superficie no se localizaron restos de pintura que pudieran pertenecer a un vehículo.
Otro de los detalles que analizaron los agentes es que no era posible relacionar las rocas adheridas a la ropa que vestía Esther con las rocas de la zona del hallazgo del cadáver. Algo significativo que les hace pensar que la postura en la que apareció fue "colocada".
Dos llamadas al movil antiguo de Esther
Lo que también llama la atención de los investigadores es el "sospechoso" comportamiento de su amigo Óscar. La última persona que la vio con vida esa noche realizó dos llamadas por WhatsApp al antiguo número de Esther. Sabía que ese número estaba en desuso. Primero omitió esta información a los agentes, después dijo que fue para confirmar si había llegado bien y terminó alegando que fue un error.
Otra de sus actitudes "extrañas" fue que ese mismo día de la desaparición de su amiga intento ocultar dos desplazamientos. Puso el modo avión del teléfono entre las 13.52 y las 15.04. A pesar de ello su posicionamiento del GPS le sitúa en su vivienda familiar de Traspinedo, donde pocas horas antes habría desaparecido Esther. Un viaje que negó en un primer momento. Este movimiento lo habría intentado hacer de forma "anónima", según los agentes.
Después se este desplazamiento, Óscar se trasladó a un lavadero automático de coches ubicado en Valladolid. En ese punto permaneció 17 minutos y limpió manualmente su vehículo, que posteriormente fue analizado por la Guardia Civil.
La segunda ocultación del investigado se produjo entre las 21:01 y las 22:11 horas de ese mismo 13 de enero. En esta ocasión los agentes comprobaron que su vehículo estaba en las proximidades de su vivienda en Traspinedo mientras que dejó su teléfono encendio en su domicilio en Valladolid.
"Escasa credibilidad"
Los investigadores consideran que la versión de Óscar tiene "escasa credibilidad" debido a las dos declaraciones que le tomaron como testigo. Y es que el posicionamiento de los terminales de Esther y su amigo sitúan a ambos en el interior de la vivienda del investigado. Lo que interpretan los agentes como que llegaron juntos a su vivienda en El Romeral.
La juez del caso ya ha levantado el secreto del sumario aunque aún hay algunas partes que siguen sin poder hacerse públicas. Estas investigaciones son las últimas realizadas en torno al registro de la vivienda de Óscar y demás establecimientos en Valladolid y nuevas pruebas que se han realizado en torno a su vehículo el Volkswagen T-Roc.
Precisamente en ese coche, en concreto en el maletero, fueron encontrados restos de Esther, de Óscar y de una tercera persona. La nueva fecha marcada en el calendario del caso será el próximo lunes cuando la magistrada tome declaración al principal investigado. Después tendrá que tomar una decisión.