España

Feijóo sobre el Sáhara: "Vigilaremos la reacción de Naciones Unidas y Argelia"

El candidato a la presidencia del Partido Popular critica en un acto junto a Juanma Moreno el giro de Sánchez sobre Marruecos y vaticina que "los perjuicios para España pueden ser muy altos"

El presidente del PP-A, Juanma Moreno, y el candidato a la Presidencia del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, este sábado en Torremolinos. Foto/ Europa Press.

"Estaremos muy vigilantes a la reacción de Naciones Unidas y Argelia". El candidato a la presidencia del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, se ha pronunciado de esta forma, tras el giro del Gobierno de Sánchez sobre su posición acerca del Sáhara Occidental y Marruecos, poco después de que se conociera que Argelia ha llamado a consultas a su embajador en Madrid por el apoyo de España al plan de autonomía para el antiguo protectorado español.

El Gobierno argelino ha expresado su "sorpresa" por el apoyo de España al plan de autonomía marroquí para el Sáhara Occidental y ha llamado a consultas a su embajador en Madrid, Said Musi.

"Las autoridades argelinas, sorprendidas por este brusco giro de la posición de la antigua potencia administradora del Sáhara Occidental, han decidido convocar a consultas a su embajador en Madrid con efecto inmediato", ha publicado el Ministerio de Asuntos Exteriores argelino en un comunicado recogido por Europa Press.

Tras haber haber reaccionado por la mañana en su acto de campaña en Valladolid, Feijóo ha vuelto a hacerlo en la tarde de este sábado en Torremolinos, junto al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, –una vez conocido el movimiento argelino– para vaticinar que "los perjuicios para España pueden ser muy altos".

No obstante, el todavía presidente de Galicia ha hecho gala de diplomacia frente al reino alauita para destacar que "Marruecos es un país aliado y socio" por lo que, según ha enfatizado Feijóo, "siempre pretendemos relaciones respetuosas y cordiales". De ahí que haya añadido que el Partido Popular "está a disposición" del vecino norteafricano.

Lo anterior no ha impedido a quien aspira a liderar el principal partido de la oposición, tras la abrupta dimisión de Pablo Casado, recalcar que desde el PP "no admitiremos ninguna ambigüedad sobre Ceuta y Melilla" en relación con la soberanía española de estas dos ciudades autónomas.

Acto seguido y ante un abarrotado auditorio Príncipe Felipe el barón gallego ha recordado, acerca del criterio seguido hasta ahora sobre la postura de España con respecto al Sáhara Occidental y Marruecos, que "esto nos lo enseñó Adolfo Suárez, Felipe González, Aznar, el presidente Rajoy y el presidente Zapatero". De esta forma ha rendido homenaje al legado de todos los exvicepresidentes del Gobierno citados para destacar el "fruto del consenso de cincuenta años de democracia", en política exterior de España que –ha lamentado– "no ha sobrevivido al Gobierno de Sánchez".

Por la mañana, durante su visita a Valladolid junto a Fernández Mañueco, presidente en funciones de Castilla y León, Feijóo ya había acusado a Sánchez de romper un consenso parlamentario de casi cincuenta años en materia de política de exterior, tras anunciar que España apoya que el Sáhara sea una provincia de Marruecos, decisión adoptada de manera unilateral por el también líder del PSOE.

El candidato a liderar el PP, que concluye este domingo su campaña en Mérida, ha aseverado que Pedro Sánchez ha roto "el principio básico predominante de que la política exterior es un política de consenso, diálogo, reflexión y discusión parlamentaria", mensaje que ha querido hacer llegar al PSOE y a su líder, y ha advertido que " un cambio drástico en materia exterior no puede ser decisión de un Gobierno y menos de un partido" a lo que ha añadido que "dar un volantazo sin contar con el apoyo suficiente es una temeridad".

Tal y como ha explicado al candidato del PP, "un país necesita un prestigio internacional, que sea previsible, que confíen en él sus aliados, que sepan sus pasos y haya sosiego en el mundo por su posición geopolítica" tras lo que a renglón seguido ha aseverado que él no es Pedro Sánchez por lo que se ha comprometido a defender la política exterior "en los lugares adecuados y con los consensos acostumbrados".

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