El expresidente del Gobierno Felipe González ha señalado este martes que el decreto del estado de alarma aprobado por el Ejecutivo de Pedro Sánchez para frenar la curva de contagiados por coronavirus "no es delegable" a las Comunidades Autónomas y ha alertado sobre una "crisis de cogobernanza" en un "estado descentralizado" como España.
"Analizo el decreto de alarma y se delega la facultad de ejecutar lo decidido, con una amplitud de interpretaciones, a los presidentes autonómicos. No es delegable, por decreto, la competencia del estado de alarma", ha sentenciado el exlíder socialista, quien también ha incidido en que la "solución alternativa" de la ley sanitaria de 1986, como reclaman desde el PP, no estaba pensada para pandemias. "Una ley orgánica no puede prever otra cosa", ha dicho.
Así se ha pronunciado en la sesión 'Abordar las desigualdades en la sociedad post covid-19', dentro de un foro económico organizado por el diario 'Expansión', que ha contado también con las intervenciones del director general de la Organización Internacional para las Migraciones, Antonio Vitorino, el consejero de Hacienda de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, el filósofo y ensayista José Antonio Marina, y el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi.
Crisis de cogobernanza
En este sentido, González ha avisado sobre una "crisis de gobernanza" en el "estado descentralizado" que se ha acentuado durante la pandemia pues, a su juicio, durante la desescalada de la primera ola las "competencias se dispersaron" en las autonomías y empezó "una carrera" para "ver quién llegaba antes a un desconfinamiento". "Hemos metido la pata inimaginablemente", ha recordado.
"El problema es que tenemos una crisis de gobernanza de un estado descentralizado", ha asegurado el expresidente, que ha recordado que las "incertidumbres" por la crisis sanitaria generan "consecuencias económicas y sociales". Así, ha explicado que un estado de alarma durante seis meses no da "certidumbre al que tenga que invertir". "No nos hemos enterado de esto. Me preocupa enormemente", ha subrayado.
Con todo, se ha mostrado a favor del sistema autonómico aunque ha confesado que no entiende "la aplicación del estado de alarma y ha recordado que la "función de los líderes políticos es dar certidumbre a sus representados". Además, ha defendido llegar a acuerdos y "resolver" los "problemas institucionales" en España.
"Domina la incertidumbre. La única manera de dar certidumbre es ponerse de acuerdo", ha reivindicado, quien ha insistido en los pactos "para ir enfrentando y sorteando los recortes" derivados por la crisis sanitaria del covid.
González ha aclarado que no "ve necesario un confinamiento" por el coronavirus, pero ha recalcado la necesidad "de clarificar" las restricciones para frenar la curva. Eso sí, ha afirmado que el estado de alarma es "la única forma jurídico constitucional para limitar" derechos fundamentales.
De este modo, ha pedido que "las normas básicas deberían homogenizarse", en referencia a las medidas frente al virus, para que cada Ejecutivo regional "no haga de su capa un sayo". En su opinión, que haya "reglas tan distintas" entre las comunidades "es un problema de gobernanza".
Presupuestos
Respecto al proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE), presentado este martes por el Ejecutivo de coalición entre PSOE y Unidas Podemos, González ha asegurado que tenía "la impresión" en que la "discusión" entre los socios "se centraba en cómo se cumplía el acuerdo de gobierno" elaborado antes de la pandemia.
"Nadie debería pensar que después de la irrupción de la pandemia, el escenario que se encontraba era el que ya tenía previsto en sus respuestas y soluciones antes de la pandemia. Me parece un disparate. Tienen que hacer borrón y cuenta nueva, y abrir el espacio de cooperación", ha apuntado.
Por ello, ha insistido en que el "único mecanismo de gobernanza frente la incertidumbre" es "ponerse de acuerdo" y "decirle a los ciudadanos algo próximo a la verdad". "Se avecinan tiempos complicados. Lo podemos sortear con frases (...) pero vamos a sufrir muchas desigualdades y se va a desarticular la sociedad", ha declarado.
"¿Qué va a pasar con los ERTE? ¿Cuántos se van a convertir en otra cosa? Que hagan un esfuerzo para ponerse de acuerdo", ha enfatizado, al mismo tiempo que ha dicho que "no es el momento de discutir" la fiscalidad en una situación como la actual. "Necesitamos una reforma fiscal seria, pero no en esta coyuntura", ha zanjado.