La Seguridad Social ha destapado un fraude en la sanidad catalana. Según ha publicado el diario El País, el foco de las irregularidades se ha detectado en varias empresas que brindan servicios de rehabilitación y logopedia la práctica de "prestar la asistencia domiciliaria con trabajadores autónomos". ç
La Inspección ha determinado los hechos como una "infracción muy grave" y ha señalado que estos profesionales ejercen su labor en unas condiciones que "en realidad son de trabajadores por cuenta ajena", por lo que tendrían que haber sido contratados laboralmente.
El organismo exige a las tres primeras empresas cuya inspección ya ha cerrado (aún queda media docena de inspecciones abiertas) "más de ocho millones de euros en cotizaciones no pagadas y la regularización de unos 300 fisioterapeutas, médicos rehabilitadores y logopedas", según el diario.
Las empresas, sin embargo, discrepan de esta interpretación y según recoge el medio mencionado han anunciado la presentación de alegaciones y recursos.
UGT espera que una vez que finalicen las inspecciones la cifra de profesionales regularizados podría ascender al millar. Estas inspecciones han tenido lugar por las denuncias sindicales realizadas tras la publicación -en diciembre de 2014- del caso de la empresa Codebi BCN.