La líder del BNG, Ana Pontón, ha aprovechado su intervención en la segunda y última sesión del debate de investidura de Alfonso Rueda como mandatario de la Xunta para pronunciar un discurso con pretensiones ‘globalistas’ en el que ha denunciado el genocidio que está sufriendo el pueblo palestino por culpa de un dirigente, el presidente de Israel, que en su opinión debería ser juzgado “por crímenes contra la humanidad”; ha recriminado a Javier Milei la peligrosa deriva que padece Argentina con el “entusiástico” aplauso del Partido Popular y ha alertado del peligro que supone el crecimiento del “trumpismo” en Estados Unidos.
Tras invocar el legado de Nelson Mandela para arrinconar a los líderes que desprecian a los pueblos oprimidos, la representante nacionalista ha centrado el resto de su discurso en reclamar a Rueda mejoras en la sanidad pública, un mayor compromiso con la lengua gallega y un rechazo expreso y contundente a empresas que, como la pastera portuguesa Altri, quieren colocar “una bomba ambiental en el corazón de Galicia”. Pontón se ha referido en varias ocasiones al proyecto presentado por la multinacional lusa para exigir que el desarrollo industrial de Galicia se base en un crecimiento sostenible y no en la construcción de megafactorías que, según denuncia, quieren engañar a la población con la promesa de fabricar tejidos ecológicos cuando en realidad desean levantar nuevas plantas de celulosas.
A la paralización de la planta prevista por Altri en el municipio lucense de Palas de Rei, la líder del BNG ha sumado también la exigencia de frenar el proceso “depredador” que, en su opinión, supone la instalación de nuevos parques eólicos en Galicia. Unas infraestructuras que están llenando la región de miles de “molinillos” mientras “los beneficios se marchan fuera”, ha asegurado.
La intervención de la representante nacionalista ha estado muy en la línea con el discurso pronunciado previamente por el líder del PsdeG, José Ramón Gómez Besteiro, que ha incidido también en la necesidad de reforzar la sanidad pública, frenar la sequía demográfica, evitar la marcha de miles de jóvenes a regiones y países que les ofrecen mejores oportunidades laborales y revitalizar una situación económica que, según ha denunciado, está muy retrasada con respecto a la que gozan otras autonomías. Besteiro ha incidido de forma especial en las largas esperas que deben soportar los pacientes gallegos para ser atendidos por un especialista sanitario y ha señalado, con sorna, que a los médicos de familia habría que cambiarles el nombre, ya que “las familias ya no conocen a sus médicos ni los médicos a sus familias”.
En opinión del líder socialista, el gobierno de Rueda durante los dos últimos años se caracterizó por ser “conformista y acomodado”, algo que no cree que vaya a cambiar a partir de ahora. Por ello, ha reclamado al dirigente popular más compromiso y eficacia en la resolución de los problemas reales que afectan a los gallegos.
Armando Ojea: ¿Me puedo aplaudir a mí mismo?
El primero en intervenir en la sesión de investidura ha sido el único representante de Democracia Ourensana, Armando Ojea, que ha centrado todo su discurso en reclamar mejoras relacionadas con la provincia donde este partido tiene implantación. Como músico que es, Ojea también ha sido el encargado de poner la única nota simpática a un debate plúmbeo al preguntar, cuando terminó su turno de 35 minutos, si se podía aplaudir a sí mismo. La respuesta del presidente del Parlamento fue contundente: “No es lo normal. Por hoy ya te llegó”.
De cerrar el turno de intervenciones de la primera parte del debate se ha encargado el portavoz del PpdeG, Alberto Pazos, que no ha escatimado críticas a la oposición por dibujar una Galicia decadente que no es la que ven la amplia mayoría de los gallegos, como se comprobó en las recientes elecciones autómicas. Pazos se ha mostrado especialmente incisivo con Ana Pontón, a la que echó en cara que se autoproclamara presidenta de la Xunta antes de que los electores dictasen su veredicto en las urnas. “ El nacionalismo lleva meses inflando un globo que el 18 de febrero explotó. La burbuja del BNG, bummmm”, ha declarado tras tachar de soberbia a la líder del BNG. “Este era su último tren, y los gallegos decidieron dejarla en el tren de la oposición”.
El portavoz popular ha desmentido que la situación de la sanidad gallega sea tan crítica como denuncia la oposición y ha afeado tanto al PsdeG como al BNG su comportamiento durante la campaña electoral en cuestiones como la marea de pellets que sufrió la costa, de la cual “no se han vuelto a acordar” desde que se celebraron las elecciones. En cuanto al desarrollo industrial, ha destacado el sinsentido que supone defender el crecimiento de la economía y a la vez echar tierra, como hace el BNG, a proyectos como el de Altri, que supondrá la creación de 2.500 empleos en una zona muy deprimida de la provincia de Lugo. En su opinión, la postura de los nacionalistas al denunciar que la multinacional lusa utilizará celulosa para fabricar fibras textiles sostenibles es tan demencial como querer montar “una fábrica de huevos sin gallinas”.
Esta tarde, tras la finalización de los discursos, Alfonso Rueda será investido presidente de la Xunta con el voto de los 40 diputados del Partido Popular. BNG y PsdeG votarán en contra y DO ha anunciado que se abstendrá.
Urente
Frenar la sequía demográfica y evitar la marcha de miles de jóvenes. Y eso, combinado con decir no a todo lo que sea industrialización y desarrollo de nuevas energías. Soplar y sorber al tiempo, típica pretensión de la izquierda. Son una maldición.