La diplomacia paralela orquestada por el Gobierno catalán (con apoyo de ERC), inmerso en la carrera para la celebración de la consulta independentista en 2014, supondrá un buen pellizco a las maltrechas arcas públicas de la Generalitat. Lejos de aplicar aquí recortes, como los perpetrados en el fondo de emergencia para víctimas de violencia de género o en universidades públicas, el Ejecutivo de Artur Mas, ha incrementado el doble las dos principales partidas para convencer de su proyecto soberanista en el exterior. Son las relativas al Consejo de Diplomacia Pública de Cataluña, el conocido como Diplocat, que obtiene 2,6 millones de euros (frente a 1,19 en 2012), y a la red de embajadas a las que no piensa renunciar, que percibe 2,2 millones. Asimismo, los nacionalistas reservan casi 11 millones para la celebración del referéndum.
El Diplocat figura como parte del sector público catalán en los Presupuestos autonómicos para el próximo año, recién presentados en el Parlament. En concreto, aparece con la categoría de consorcio, junto a otras 50 entidades de estas características. Constituido a finales de 2012, por lo que es una criatura de la aventura secesionista de Artur Mas (no heredada del tripartito), integra a la Generalitat, diputaciones, asociaciones municipalistas y representantes de universidades, escuelas de negocio, cajas de ahorro, patronales y cámaras de comercio.
Este organismo ha tomado el testigo del antiguo Patronat Catalunya Món y ha asumido la gestión de las becas que la Generalitat creó hace 30 años para a estudiantes catalanes en universidades extranjeras en el ámbito de las relaciones internacionales. El pasado julio, el Diplocat puso en marcha un máster dirigido a empleados públicos de la Administración catalana para formarles en este campo y en el mundo de la diplomacia. El curso tiene una duración de nueve meses y es compatible con la jornada laboral de sus participantes, que asciende a una veintena en esta primera promoción.
PP y Ciutadans exigen el cierre de este 'criatura' secesionista, que tiene entre sus "objetivos estratégicos" el impulsar la 'marca Cataluña' en el extranjero
El programa está dirigido por el catedrático de la Universidad de Princeton (Estados Unidos) Carles Boix y se hace en colaboración con la Escola d'Administració Pública de Catalunya, el Institut Barcelona d'Estudis Internacionals (IBEI) y varias universidades catalanas. El temario para estos diplomáticos aficionados incluye contenidos como Derecho Internacional Público, Historia de las Relaciones Internacionales, Economía y Comercio internacionales y Asuntos Europeos, entre otras asignaturas.
Al frente del Diplocat se encuentra Albert Royo, que ejerce de secretario general del mismo tras su etapa como responsable de comunicación de la oficina de la Comisión Europea en Barcelona. Los seis "objetivos estratégicos" de este ente son apoyar la estrategia de diplomacia pública del Gobierno de Mas, impulsar la marca Cataluña en el extranjero, fomentar el conocimiento de Cataluña en el exterior y potenciar la participación de la sociedad civil catalana en las actividades de diplomacia pública.
El pasado abril, Diplocat elaboró y remitió un argumentario (también costeado con dinero público) a sus entidades colaboradoras para explicar al público anglosajón su visión de la "realidad catalana". Además de definir a España como un país "caótico" y "recentralizador", señala que "tras 35 años intentando encajar Cataluña dentro España, hay un sentimiento común en la mayoría de los ciudadanos catalanes de que cualquier negociación es imposible". Tanto PP como Ciutadans han pedido el cierre de este consorcio por tales prácticas, basadas en manifestaciones "plagadas de calumnias".
Visita del 'president' a Tel Aviv
El Diplocat trabaja en coordinación con la red de 34 oficinas comerciales y cinco embajadas (no sólo son centros de negocios pues promueven la independencia) que la Generalitat tiene en el exterior. El Gobierno de Mas destina al funcionamiento de estas sedes en 2014 un total de 2,2 millones de euros, mientras que en 2012 (el presupuesto se prorrogó para 2013) la partida fue de 1,1 millones. El Ejecutivo nacionalista cuenta con delegaciones principales en Nueva York, Bruselas, París, Berlín y Londres.
El president tiene previsto viajar el próximo sábado a Israel y ha recurrido para ello a la embajada española en Tel Aviv. De esta forma, comunicando su plan de viaje a la legación de Exteriores y asegurándose así contactos en el destino, Mas evita que la visita sea un fracaso como ocurrió en sus desplazamientos a Moscú y Bruselas en 2012 y 2013 respectivamente, cuando fue por libre con la intención de internacionalizar su proyecto soberanista.