Los presupuestos de la Generalitat catalana para 2015 incluyen partidas destinadas a vender fuera de España el proyecto soberanista que encabeza Artur Mas. El Govern prevé destinar 19,7 millones de euros al capítulo de "acción exterior". De esa cantidad, 11,1 millones son para "relaciones exteriores". Entre las prioridades que aparecen en el esquema de las cuentas públicas se incluye "dar a conocer internacionalmente el proceso democrático iniciado para el derecho a decidir". Asimismo, el documento sobre los presupuestos menciona, como una de las acciones principales en esta línea, "consolidar Cataluña como socio de referencia de la Unión Europea".
Teniendo en cuenta la ruptura entre CiU y ERC, el escenario más probable es que Mas y Mas-Colell no logren apoyos a este proyecto de presupuestos en el Parlamento autonómico
El pasado martes el conseller de Economía del Ejecutivo catalán, Andreu Mas-Colell, presentó el proyecto de presupuestos que ha elaborado y que ahora llegan al Parlament. Un proyecto en el que el Govern reconoce que depende del Gobierno central para cuadrar sus maltrechas cuentas públicas. En el esquema hecho público por la Generalitat aparecen algunas partidas cuanto menos llamativas, como los 341 millones de euros que prevé destinar a los medios de comunicación públicos y privados. No está claro, en todo caso, si este presupuesto podrá convertirse en real, teniendo en cuenta la crisis política que se vive en Cataluña, con la independencia como asunto primordial para los partidos y con la ruptura del pacto de estabilidad que acordaron en 2012 CiU y ERC. El escenario más probable es, de hecho, que Mas y Mas-Colell no logren apoyos a este proyecto en el Parlamento autonómico.
Aumenta la cantidad
En este contexto político, estaba claro que en este primer documento sobre los presupuestos no iban a faltar las referencias a los planes independentistas del Govern. El texto incluye un apartado referido a "acción exterior". Para estos asuntos, el Ejecutivo de CiU prevé un gasto de 19,7 millones de euros. De esa cantidad, 8,6 millones serían para "cooperación al desarrollo" y otros 11,1 millones se destinarían a "relaciones exteriores". Tal y como han publicado varios medios en Cataluña, esta partida se incrementa en un 20% respecto a las cuentas de 2014.
Entre sus prioridades de acción exterior, la Generalitat incluye "fomentar la proyección exterior de Cataluña y las relaciones con otros gobiernos y organismos internacionales"
La Generalitat incluye en su esquema las prioridades de este campo de actuación. Y estas son "fomentar la proyección exterior de Cataluña y las relaciones con otros gobiernos y organismos internacionales"; "dar a conocer internacionalmente el proceso democrático iniciado para el derecho a decidir, dando apoyo a las iniciativas de la sociedad civil"; y, por último, "impulsar y coordinar la acción exterior del Govern y generar sinergias con la acción exterior de otros organismos públicos y privados". O sea, más dinero público para vender en el extranjero los planes separatistas de Mas.
Además de las mencionadas prioridades, la Generalitat glosa en este documento las "actuaciones principales incluidas en los presupuestos" que tienen que ver con la "acción exterior". Ahí se mentan diez puntos que serían los ejes de actuación en este campo. Y destacan, entre otros, los objetivos de "consolidar Cataluña como socio de referencia de la UE", "promover la diplomacia económica con aquellos países clave para los intereses de Cataluña", "mediante DIPLOCAT, acompañar a la sociedad civil en su internacionalización y la internacionalización del país" o "fortalecer las relaciones con el cuerpo diplomático y consular".
Un negro panorama
Con independencia de las partidas concretas, el panorama es bastante negro para el Govern. Las cifras no son muy halagüeñas. Cataluña acumulaba hasta septiembre un déficit de 3.070 millones, es decir, de un 1,53%, frente al 1% del PIB autorizado para todo el año. A pesar de ello, la Generalitat se ha comprometido este año a recuperar tanto la paga extra para los 210.000 empleados públicos como a poner fin a los recortes a los interinos, lo que elevará el gasto de la administración en unos 600 millones.
Por tanto, para cuadrar las cuentas el Ejecutivo catalán incluirá ingresos que, según sus tesis, le corresponden y que "dependerán de la voluntad política el Gobierno central". Al presentatr las cuentas, Mas-Colell cifró esta recaudación adicional en los 2.000 millones de diferencia entre la previsión de ingresos extraordinarios y lo recaudado hasta ahora. No puede olvidarse que, como publicó días atrás Vozpópuli, los gestores de la Generalitat se están viendo obligados a no pagar a las farmacias o a las residencias de anciones al tener que afrontar con urgencia pagos de sus vencimientos de deuda.