“Ha sido una reunión tensa, dura y desagradable”. Esa es la conclusión del encuentro que celebró el jueves la junta directiva de CEIM, según uno de los asistentes. Tres horas para debatir las normas electorales.
El presidente Arturo Fernández pidió que se creara un grupo de trabajo para interpretar las normas. La oposición, que encabeza Hilario Alfaro, no participará y quiere que se mantengan las actuales y no se hagan listas cerradas como quiere la actual dirección. Están dispuestos a acudir a los tribunales “si se modifican las normas”.
Los empresarios madrileños han vuelto a la guerra. En tiempos de Alberto Ruiz-Gallardón y su amigo Fernando Fernández Tapias, la bronca por hacerse con el poder en la Cámara de Comercio y CEIM fracturó al empresariado madrileño. Eran tiempos en los que ambas organizaciones manejaban mucho dinero. Tras unos años de dominio absoluto de Fernando Fernández Tapias, Esperanza Aguirre apoyó a su también amigo Arturo Fernández que se hizo con las dos instituciones y la vicepresidencia de la CEOE.
Arturo ha decidido presentarse a la reelección. Está atravesando, como muchos empresarios, una fase muy difícil. Además, parece que el expresidente de la CEOE, y dueño de Viajes Marsans, Gerardo Díaz Ferrán, se fue a la cárcel dejándole alguna deuda millonaria. Sus contratas de restaurantes han salido de UGT, del Congreso de Diputados, de Ifema... Pero además, está imputado en Bankia y tiene unas inspecciones de Trabajo tras unas denuncias por haber pagado en dinero negro a algunos empleados. De todos los problemas que tiene quizá sea éste el más grave políticamente.
Arturo ha dicho en muchas ocasiones que esos problemas se iban a solucionar y que no había razones para no presentarse a la reelección de presidente de CEIM y anunció que acudiría a los comicios que se van a celebrar el mes de marzo. Nunca había habido dos candidatos. Siempre se alcanzaba el consenso antes de votar. Era la unidad empresarial.
Pero en esta ocasión se presenta Hilario Alfaro, presidente de Acocem y un hombre muy activo en las actividades de las patronales. Ha formado un equipo de hombres vinculados a las pequeñas y medianas empresas y lleva meses de campaña electoral.
En CEIM se considera a Alfaro el instigador de una campaña para que se difundiera en los medios de comunicación su difícil situación económica. Además creen que está contando a las organizaciones que sus diferencias con el anterior secretario general de CEIM, Alejandro Cruceiro, han costado a la patronal más de 600.000 euros a la patronal madrileña.
Arturo no se entendía con Cruceiro, que procedía de la época de Fernández Tapias, y aunque le faltaban dos años para jubilarse prefirió pagarle un finiquito millonario que tenerlo en su organización. Los críticos con Arturo Fernández dicen que el fichaje de Lourdes Cavero (esposa del presidente de la Comunidad de Madrid) como vicepresidenta, que hace labores ejecutivas, le resta independencia a la organización. Niegan que Fernando Fernández Tapias esté apoyando a Hilario Alfaro y menos que esté poniendo dinero para su candidatura como se les ha llegado a insinuar.
En este ambiente cada uno de los 1300 votos que emiten empresas, organizaciones sectoriales, y territoriales es una mina. Uno de los hombres que puede tener influencia a la hora de que gane uno u otro es Alfonso Tezanos, un empresario que está en la calle con su gente constantemente y que no se lleva bien con Hilario Alfaro y no tan mal con Arturo.
La actual dirección parece que no va a aguantar “los constantes ataques” de los aspirantes y que piensa ya en responder con la misma moneda. “Las próximas semanas van a ser duras”, decía ayer un empresario que asistió a la reunión.
