El PSOE de la Asamblea de Madrid quiso llevar al banquillo a todo el Gobierno de Madrid por la venta de pisos del IVIMA a los llamados fondos buitre, pero la disolución de la Cámara frenó el objetivo socialista, que acudió a los juzgados poco después de que el Ejecutivo de Ignacio González aprobara en Consejo de Gobierno la operación por la que se vendían 3.000 pisos a Goldman Sachs y Azofra por 200 millones en el año 2013.
Los socialistas acusaron entonces, y la demanda sigue su curso, de quebranto patrimonial al Gobierno de la Comunidad de Madrid. Tras aquella denuncia, se imputó a la gerente del IVIMA, Ana Gomendio. Hasta la fecha no han terminado las investigaciones policiales y judiciales. Sin embargo, el principal objetivo político era imputar a todos los miembros del Gobierno regional. Sin embargo, el retraso en la tramitación de la causa y el cambio de legislatura hizo que los socialistas aparcaran esta idea que podría ser puesta en marcha otra vez en cualquier momento.
"Antes estaban ustedes acostumbrados a los momentos de ordeno y mando y eso se acabó", le ha dicho Espinar a González
Tensión en Vallecas
Por otra parte, este vieres se celebró una sesión de la Comisión de Investigación de Corrupción en la Asamblea de Madrid, en Vallecas, en la que hubo una tensión que no se recordaba desde el famoso ‘tamayazo’. Los momentos de mayor bronca fueron cuando el diputado de Podemos, Ramón Espinar, le espetó al expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González: "Ahora estoy hablando yo. Antes estaban ustedes acostumbrados a los momentos de ordeno y mando y eso se acabó. Yo pregunto y usted contesta".
Desde la oposición se decía que González había acudido a la comisión como si fuera aún presidente de la Comunidad. Sin embargo, el que fuera responsable del anterior Gobierno del PP no permitió que se le acusara de mala gestión y contestó uno por uno los argumentos de la oposición. El final de su intervención fue saludado por aplausos desde las filas populares.
La presidenta de la Comisión, Dolores González (Ciudadanos), no actuó en algunos tramos con la objetividad de un puesto como el suyo. En uno de los momentos de la comparecencia de Pablo Cavero, consejero de González y Aguirre, dudó en darle un turno para defenderse de las graves acusaciones que le había hecho el diputado de Podemos, Marco Candela. Este diputado pidió a la presidenta que Cavero no contestara porque no le había hecho ninguna pregunta.
González ha asegurado que vender las viviendas a los fondos buitre tenía como objetivo reducir gastos
Tras autorizarle la contestación, Cavero le dijo al diputado que sus palabras eran ofensivas y que se amparaban en la inmunidad parlamentaria porque si las decía en la calle le ponía una querella contra el honor de forma inmediata. El podemita Candela pidió a Cavero que dimitiera como concejal del Ayuntamiento de Madrid después de considerar que había causado un daño patrimonial a los ciudadanos de 100 millones de euros e insinuó que su relación con Goldman Sachs estaba detrás de la adjudicación a esa empresa. Su petición de dimisión fue secundada por Encarnación Moya (PSOE).
"Han generado un déficit del copón"
En otra de las intervenciones, Espinar protestó por la “barra brava” que había traído el PP a la Comisión, pidió a González que no le diera clases y acusó al PP de haber generado un “déficit del copón”. González explicó que vender las viviendas tenía como objetivo lograr ingresos y reducir gastos. Pero Espinar le replicó que “la vivienda protegida no estaba pensada para quien tiene un testaferro en Delaware”. La presidenta le llamó la atención a lo que el disuado de Podemos contestó que no se refería a González y que no lo iba a retirar.
