El ex socio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres, ha lanzado un órdago al entorno más próximo del rey, al que acusa de estar implicado en los negocios del duque de Palma. Su abogado, Manuel González Peeters, asegura tener bajo su poder más de 200 emails que comprometerían tanto a la infanta Cristina como al propio rey Juan Carlos I, según ha hecho público este lunes el diario ‘El Mundo’.
A cambio de no hacerlos públicos, Torres exige el pago de 10 millones de euros por parte del entorno de Urdangarin además de la garantía de quedar libre de la cárcel. Su abogado asegura que los documentos constituyen pruebas delictivas que podrían hacer un daño “irreversible” a la monarquía parlamentaria.
Mientras tanto, Diego Torres vive obsesionado con su seguridad personal y comenta en su entorno que incluso “teme por su vida”. Según recoge el diario, cambia sistemáticamente de móvil y de vehículo, para evitar su seguimiento y apenas abandona su domicilio de Sant Cugat.
Uso ventajista del derecho procesal
El artículo da por hecho que el letrado González Peeters se ha aprovechado del derecho procesal para urdir este chantaje.
El pasado 11 de febrero, sus clientes Diego Torres y Ana María Tejeiro se acogieron al derecho a no declarar, en una estrategia por ganar tiempo para negociar con Iñaki Urdangarin un acuerdo penal y económico. Cuando el duque de Palma descargó todas las culpas en su antiguo socio, Peeters trasladó sus pretensiones económicas al entorno más cercano del yerno del rey, al que llegó a exigir hasta 30 millones de euros a cambio de su silencio.
Dicha cifra fue rebajándose hasta la exigencia actual de Diego Torres, a la que habría que añadir un millón de euros para pagar los honorarios de su abogado además de la obtención de un “trabajo estable”. Y es que parece que el empresario no soporta su ruina legal y económica mientras es testigo del ritmo de vida que mantiene su ex socio en Washington.