Algunas voces del Grupo Parlamentario Popular consideran que sería un disparate y una enorme incoherencia dejar que uno de los diputados que más se identifican con el movimiento soberanista en Cataluña encuentre asiento en la Mesa del Congreso, el máximo órgano de gobierno de esta institución. Aunque hay otras voces más templadas, contrarias a que estalle un conflicto institucional a pocos meses de las elecciones, el PP catalán está presionando a tope, haciendo, incluso, llegar su parecer a Mariano Rajoy, para que el grupo parlamentario no ceda y vete el nombramiento de Jordi Xuclá. El problema lo ha originado la marcha del parlamentario Jordi Jané como consejero de Interior de la Generalitat, una vez que Artur Mas se vio obligado a remodelar su Gabinete tras la ruptura con Unió. Jané, exasesor jurídico del grupo parlamentario catalán en Madrid antes de ser diputado, es considerado como un político de carácter moderado, de perfil muy técnico, circunstancia que favoreció su acceso a la Mesa del Congreso al inicio de la legislatura con el apoyo del PP y del PSOE, que cedieron el puesto a CiU.
El PP no quiere un conflicto institucional, pero se resiste a que el ala dura de Convergencia se siente en la Mesa del Congreso
Las cosas han cambiado, entre otras razones porque quedan pocos meses para las elecciones generales y el PP catalán, presionado por el empuje de Ciudadanos, quiere enviar señales de mayor firmeza ante el reto secesionista en Cataluña a pocas semanas también de las elecciones del 27 de septiembre, una convocatoria que todavía está en el aire. El PP nacional ha respetado en los últimos años a Josep Antoni Durán i Lleida como presidente de la Comisión de Exteriores del Congreso, pese a su militancia nacionalista, pero la mayoría de sus dirigentes no quieren transigir ahora con Xuclá por la evolución del proceso soberanista en Cataluña y también por la influencia que la ruptura con Unió ha tenido en Convergencia, liberada de ambigüedades y cada vez más identificada con el objetivo de crear un Estado independiente.
La votación se registrará en el pleno extraordinario convocado para el jueves y, en ella, el PSOE adelanta que votará a favor de Xuclá, al margen de su perfil político, pues la elección del candidato que debe sustituir a Jané considera que le corresponde desde el punto de vista de la normalidad institucional a Convergencia, sin entrar en mayores debates. Como el PP tiene la llave de su elección y, previsiblemente, votará en contra, Xuclá no accederá a la Mesa del Congreso y CiU perderá la representación que tenía en ella. Fuentes nacionalistas anticipan que la actitud del PP no llevará a Convergencia a cambiar de candidato. En las filas nacionalistas hay también sus diatribas, después de verse frustrada la operación pensada por un sector del partido para aupar al diputado Pere Macías a la Mesa, en sustitución de Jané, y colocar a Carlos Campuzano como portavoz del grupo.
Apoyo al 'derecho a decidir' y el Estado independiente
Xuclá tiene buena relación con la mayoría de las formaciones parlamentarias y lee la postura del PP como un mero pretexto para conciliarse con sus votantes aprovechando el enfrentamiento entre el Gobierno y la Generalitat. El diputado ha apoyado el llamado derecho a decidir, ha defendido que Cataluña, como Estado independiente, pueda mantenerse dentro de la Unión Europea y ha sido uno de los encargados por Artur Mas de difundir la versión más templada del soberanismo entre los embajadores extranjeros y las principales capitales comunitarias con el objetivo de vencer los recelos que en la mayoría de ellas suscita el plan secesionista catalán. “Si la Alemania del Este se incorporó ipso facto a la UE, encontraríamos también una solución para Cataluña”, ha reflexionado en alto en más de una ocasión.
El PSOE votará a favor de Jordi Xuclà para favorecer la normalidad institucional
Diputado por Gerona, Xuclá tiene 42 años, ha sido diputado en tres legislaturas y es vicepresidente de la Internacional Liberal, a cuya última cumbre asistió en compañía de Artur Mas para conseguir apoyos a favor del ‘derecho a decidir’. En su presentación de bienes al inicio de la legislatura, declaró tener una cuenta corriente con casi 9.000 euros, acciones en una empresa familiar por casi 280.000 euros, una vivienda y un préstamo hipotecario pendiente de amortizar con Caixa de Pensiones por importe de 154.000 euros.
Antes de finales de julio, el Congreso volverá a votar otro relevo en la Mesa del Congreso, en este caso el de la diputada socialista Carmela Silva, próxima presidenta de la Diputación de Pontevedra.