Los rectores de las universidades españolas se asistían el pasado viernes a la sesión ordinaria del Consejo de Universidades, después de que la pasada semana decidieran plantar al Ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, por no incluir en el orden del día el debate sobre el Real Decreto de medidas urgentes de racionalización del gasto público en el ámbito educativo. En esta ocasión Wert no asistió por coincidir con el Consejo de Ministros, pero en su lugar se sentó a la mesa la secretaria de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades, Montserrat Gomendio.
En rueda de prensa posterior a la reunión, tanto Gomendio como la presidenta de la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas, Adelaida de la Calle, resaltaban el buen clima de entendimiento que imperó en el encuentro, algo que consideraban como "lo normal en estos casos".
Después de una mañana de debate, la secretaria de Estado explicaba los dos principales puntos de fricción entre rectores y ministerio, especialmente el de el endurecimiento de los requisitos que permitan acceder a las becas académicas. El Real Decreto eleva en medio punto la nota necesaria para acceder a las ayudas: un 5,5 para las becas generales y un 6,00 para una beca salario, y esto se aplicará a todos los estudiantes, incluidos quienes ya estén disfrutando de ellas.
Según Gomendio, "tenemos que asegurarnos que es una inversión eficiente y una garantía de que los alumnos van a continuar estudiando". Se exigirá en ese caso que superen entre un 80 y 90% de los créditos a los estudiantes de Artes y Humanidades, Ciencias y Ciencias de la Salud, y un 65% para los de ingenierías y Arquitectura.
Las becas salario se conceden a personas con un nivel adquisitivo muy bajo, y en la situación actual ahondará más en la economía de las familias
"Las becas suponen el 66% del presupuesto de nuestra cartera, y es un esfuerzo enorme para la sociedad en su conjunto, de manera que creemos lógico pedirles a los alumnos ese esfuerzo académico, ya que se requiere un mínimo, no la excelencia", señalaba la representante de Educación.
Los rectores mostraban su rechazo ante el decreto de umbrales al considerar que en un momento económico con el actual, que las familias se vean sometidas a otro punto más de requerimiento va a afectar seriamente a su economía. "Las becas salario se ofrecen a personas en situación de casi pobreza, con niveles muy bajos de nivel adquisitivo", decía De la Calle. Sin embargo, son conscientes de que su postura no es vinculante, pese a lo cual el Gobierno admite que eso no significa que no se vaya a tener en cuenta.
El otro punto del que más se habían quejado los representantes de la enseñaza superior era el de las franquicias de las universidades extranjeras en España, reclamando que pasen los mismos controles de calidad y que las titulaciones ofrecidas dejen a todos los alumnos en igualdad de condiciones.
El decreto de Selectividad
Pese a que el Gobierno pretende aprobar el decreto 'lo antes posible', lo cierto es que va a coincidir con las pruebas de acceso a la Universidad, incluso algunas comunidades habrán realizado ya los exámenes. El mensaje de la secretaria de Estado de Educación para los estudiantes era que han de esforzarse más pese a que su entrada en vigor sea posterior.
Otro de los temas de debate fue el decreto de Selectividad, que aplaza la prueba oral de inglés al curso 2013-2014, algo que De la Calle agradecía por su altísimo coste para las universidades. De hecho Gomendio señalaba que ya se está realizando un prueba piloto para ver cómo se puede introducir el examen oral de inglés en la selectividad, y según los resultados se decidirá qué hacer.
Se reencontrarán la próxima semana
La reunión del viernes permitía además llegar al acuerdo de fijar el Consejo extraordinario de Universidades para el próximo 7 de junio, donde el único orden del día será el debate del Real Decreto de medidas urgentes, que introduce cambios en el régimen de dedicación docente e investigadora de los profesores universitarios, el aumento de las tasas universitarias, la ordenación de los títulos o la penalización a las universidades que no cumplan con el objetivo de déficit.
Todas estas medidas han sido rechazadas por los rectores, que se preguntan cómo se van a estructurar estos cambios de requerimientos, ya que ven 'dificultades técnicas' para la aplicación de algunos de ellos.
Pese a su ausencia del viernes sí está previsto que José Ignacio Wert acuda al Consejo extraordinario del próximo jueves.
