El Juzgado de Instrucción número 3 de Toledo ha decretado el sobreseimiento provisional del caso de los primos Ángel, de 11 años, y Fernando, de 17 años, que desaparecieron en Madrid y fueron localizados muertos en el vertedero de Toledo, según un auto de este viernes que adelanta Vozpópuli. El magistrado Javier García López considera que en base a las diligencias practicadas "no existe indicio alguno de que la muerte de los menores fuera causada por terceras personas".
El juez afirma que las "investigaciones, datos e informes obrantes en las actuaciones determina una causa accidental de su fallecimiento". "Lo relevante es que no existe indicio alguno de violencia causada por terceras personas como causa del fallecimiento que permita la continuación del procedimiento", añade en un auto al que ha tenido acceso Vozpópuli.
Así, el magistrado asegura que la Policía de Villa de Vallecas, encargada de la investigación, ha realizado "distintas y muy diversas gestiones para el esclarecimiento de los hechos, tanto en relación con los movimientos de los menores desde su desaparición en Madrid como respecto de todos los familiares y personas que pudieran tener conocimiento de los hechos, recabando información sobre las diversas sospechas que surgieron en el origen".
Las diligencias concluyen que la hipótesis de que el fallecimiento de los menores se produjo de forma accidental. Para ello se analizó el recorrido que realizaron los primos la noche del 10 al 11 de diciembre de 2023 y que finalizaría en un contenedor de basura en el que se habrían resguardado los menores en la zona de la Avenida de la Reconquista de Toledo. "Coincidiendo con la hora de recogida de dicha zona, pudiendo los menores haber quedado hacinados en el interior del camión, produciéndose su fallecimiento y apareciendo por ello en el vertedero Ecoparque", manifiesta.
La muerte de los primos fue "accidental"
Para ello, es fundamental los informes forenses que concluyen, tras una exposición completa de las actuaciones realizadas, que la muerte de los menores se habría producido como consecuencia de "una asfixia por la compresión toracoabdominal derivada de su sepultamiento por los restos de basura y la compresión y desplazamiento de esta en el interior del vehículo de recogida por las prensas con las que cuenta".
El informe añade que las lesiones observadas en los cuerpos de los primos eran postmortales, producidas como consecuencia de las distintas fases por los que pasan los residuos en la planta de tratamiento; que los resultados toxicológicos permiten descartar una causa tóxica en el fallecimiento; y que no se objetivaron lesiones externas en zonas consideradas vitales que pudieran justificar la posible intervención de terceros en el mecanismo de la muerte. "Por ello, consideran las muertes de etiología médico legal accidental", finaliza.
Después de meses de diligencias, los agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Villa de Vallecas consiguieron reconstruir el recorrido que realizaron Ángel, de 11 años, y Fernando, de 17 años, el pasado 10 de diciembre. Los primos dijeron que iban a comprar un bocadillo en el Híper Usera de la calle General Ricardos en Carabanchel. Sin embargo, se trasladaron a Toledo utilizando el Metro y el autobús.
En Toledo dieron varias vueltas, no se descarta que intentaran visitar a la expareja de Fernando, pero no localizaron la ubicación de forma correcta. Después, ya por la noche, intentaron volver a Madrid en autobús pero perdieron el último transporte por 5 ó 10 minutos. Su intención era quedarse a dormir en la estación algo que les impidieron los responsables del complejo que cerraron las instalaciones.
Los primos sin lugar para dormir
Las cámaras de seguridad captaron como estos jóvenes se marcharon a un hotel cercano donde intentaron alojarse y contratar una habitación. También fueron rechazados del establecimiento ya que los menores no pueden hospedarse sin la autorización de un adulto, según han podido comprobar los agentes de la Policía Nacional con el visionado de las cámaras de seguridad.
Con esta situación, sin transporte para volver a casa y con la aparición del frío y la lluvia, los dos primos se introdujeron en uno de los contenedores de basura. Los agentes creen que fallecieron por asfixia al quedarse sin aire cuando quedaron atrapados en el interior del camión que recogía los residuos.
El cadáver de Fernando, de 17 años, se localizó cinco días después de su marcha. Los investigadores consideran que en este periodo de tiempo los restos de los primos pudieron separarse, dentro de las cadenas del vertedero, y de ahí que costara más hallar el cuerpo sin vida de Ángel, que fue encontrado casi un mes después. Los dos menores tenían golpes propios de la cadena de tratamiento de residuos.
No hubo implicación de terceros
Las dos familias pudieron enterrar los cuerpos de los dos menores. El pasado 9 de febrero de 2023, los padres de Ángel velaron los restos del pequeño de tan solo 11 años. Descartaron realizar una segunda autopsia a los cadáveres tras recibir el consejo de los investigadores.
Los familiares de Ángel y Fernando y su abogado, Marcos García-Montes, sospechaban que detrás de su desaparición estaba presuntamente el círculo cercano de Lucía, la exmujer del mayor de los fallecidos. Una teoría que finalmente ha sido descartada por la Policía Nacional que han concretado que hubo implicación de terceras personas en el trágico suceso.
