El juez de la Audiencia Nacional Alejandro Abascal admite a trámite la querella presentada por la Asociación Dignidad y Justicia (DyJ) contra cuatro exjefes de la organización terrorista ETA a los que considera responsables de haber ordenado el atentado contra la comisaría de la Ertzaintza en Ondarroa (Vizcaya). Un ataque que se produjo el 21 de septiembre de 2008 y que se saldó con 18 heridos y cuantiosos daños materiales.
En un auto del pasado domingo, el responsable del Juzgado Central de Instrucción Número 1 accede a investigar a Garikoitz Aspiazu Rubina, alias 'Txeroki'; Aitzol Iriondo, 'Gurbitz' o 'Barbas'; Mikel Carrera, 'Ata'; y Ainhoa Ozaeta, 'Kuraia, a pesar de que la Fiscalía informase en contra de admitir la querella.
De igual forma, el magistrado admite el escrito de DyJ después de que la Sala de lo Penal acordase este mismo mes archivar provisionalmente la causa que estaba abierta contra 'Txeroki', al considerar, en consonancia con el Ministerio Público y la defensa, que no hay pruebas suficientes de que diera la orden de atentar contra la comisaría.
Pero la aparición de nuevos datos sobre el 'modus operandi' del comité ejecutivo de ETA o "Zuba" sobre la forma de hacer entrega de los coches bomba que utilizaba la banda terrorista para atentar, han permitido al juez Alejandro Abascal encontrar una vía a investigar. Por un lado ver si Txeroki intervino a la hora de dar la orden del atentado contra la citada comisaría, que causó graves daños y heridas a trece agentes y cinco civiles.
La querella presentada por la Asociación Dignidad y Justicia
La Asociación Dignidad y Justicia, que es la que ha impulsado el procedimiento, aportó una sentencia de la Audiencia Nacional en relación a otro atentado en Santoña el mismo día 21 de septiembre de 2008, que declaraba probado que el comando Otazua utilizó un coche entregado desde Francia con la señal de "una barra de pan en el salpicadero", como ocurre con el comando en Vizcaya que cometió la acción criminal contra la comisaría de Ondarroa.
Esto, dice el juez en su auto, hace "necesario (...) investigar y corroborar" si Txeroki "pudo tener participación directa en la orden de atentar contra la Policía Vasca en Ondarroa", de modo que reabre la causa contra él. Así como tres exjefes de ETA: Aitzol Iriondo, Gurbitz; Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, Ata; y Ainhoa Ozaeta, Kurala "por su condición de dominadores de la organización terrorista ETA desde su posición de máximos dirigentes del órgano de dirección" en el momento en el que se perpetró el atentado.
La decisión del juez, adoptada en contra del criterio de la Fiscalía, sigue la línea de otras resoluciones adoptadas por diferentes magistrados de la Audiencia Nacional, que investigan una serie de querellas de Dignidad y Justicia contra exdirigentes de la banda terrorista por su presunta responsabilidad a la hora de ordenar atentados.
Uno de ellos es el secuestro y asesinato del concejal de Ermua Miguel Ángel Blanco hace veinticinco años, por el que otro magistrado, Manuel García Castellón, ha imputado a Miguel Albisu Iriarte, Mikel Antza; Soledad Iparaguirre, Anboto y José Javier Arizcuren Ruiz, Kantauri.
