El joven acusado de agredir sexualmente a una chica en Madrid en mayo del año pasado se enfrenta a más de cinco años de cárcel. La víctima ha necesitado durante 210 días tratamiento psicológico y psiquiátrico. La Fiscalía y la acusación particular solicitan esta pena para el acusado y ya se ha decretado la apertura del juicio oral. Este chico tendrá que pagar una cantidad de 40.000 euros para asegurar las responsabilidades pecuniarias, según un auto al que ha tenido acceso Vozpópuli.
El Juzgado de Instrucción número 33 de Madrid ha finalizado la investigación sobre el agresor sexual de la calle Yébenes. En un auto, fechado el pasado 5 de enero, el magistrado Tomás Martín Gil, acuerda la apertura del juicio oral contra Pablo C.H., el joven que fue detenido por la Policía Nacional en mayo del 2023 en el lugar de los hechos y desde ese momento se encuentra en la cárcel.
El acusado está en la cárcel
El juez envía al banquillo a este chico por un delito de agresión sexual y lesiones. Ahora tendrá que ser el Juzgado de los Penal, que por turno corresponda de los de Madrid, el que dirima un caso mediático y decida si el hombre será condenado.
El informe de acusación la Fiscalía Provincial de Madrid considera que está probada con las diligencias la agresión sexual de la calle Yébenes en Latina. El acusado, mayor de edad y sin antecedentes penales, se abalanzó por la espalda sobre la víctima a las 4:40 horas del pasado 15 de mayo de 2023 en la calle Yébenes. Tenía el "fin de satisfacer su ánimo libidinoso".
210 días de tratamiento en Madrid
Pablo C.H. tapó la boca y arrojó al suelo a la chica, de 27 años. Mientras forcejeaba con ella le realizó tocamientos en los pechos y las nalgas a pesar de los intentos de las víctima por defenderse. Las heridas de esta joven tardaron 14 días en curarse. Sufrió "eritemas en ambos brazos con hinchazón en cara lateral derecha del cuello, contusiones en pierna derecha, excoriación en rodilla y contusión en nalga izquierda con eritema".
El proceso más largo de sanar fue el estrés postraumático que requirió tratamiento psicológico y pisquiátrico. Tardó 210 días en curar, todos ellos impeditivos para sus ocupaciones habitales y aún así le han quedado secuelas por lo que vivió. La Fiscalía pide tres años y seis meses de cárcel por el delito de agresión sexual y dos años por las lesiones de la víctima. Además, el acusado debería indemnizar a la joven son 21.000 euros por los días de curación de las lesiones y en 6.000 euros por las secuelas y los daños morales.
La defensa de la víctima, ejercida por Beatriz Uriarte, solicita de igual forma cinco años de prisión por el delito de agresión sexual. La cantidad de responsabilidad civil a cobrar es ligeramente mayor ya que piden 30.000 euros por las secuelas físicas y psíquicas.
Este suceso se remonta a la madrugada del 15 d mayo. Una patrulla de la Policía Nacional de Latina fueron los que escucharon los gritos de auxilio de la víctima cuando patrullaban a la altura del número 91 de la calle Yébenes. La joven se acababa de bajar de un UBER y fue atacado por un hombre.
"Estoy harto de que me llamen enano"
Pablo C.H., de 23 años, fue detenido tras una persecución. En un primer momento aseguró: "Yo no he sido, soy gay". Poco después, en dependencias policiales confesó los hechos y manifestó de viva voz: "Es que estoy harto de que las mujeres se rían de mi, de que me llamen enano y que no me tomen en serio. Por eso he ido a por ella. La he liado".
La investigación del suceso pasó a manos de la UFAM de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Estos agentes fueron los que tomaron las delcaraciones al acusado y a la víctima. Pablo C.H fue enviado a la cárcel por el juzgado de guardia.
Su defensa solicitó su puesta en libertad ya que la peña señalada para el delito presuntamente cometido no excede los dos años de cárcel al tratarse de tocamientos superficiales por encima de la ropa. Lo consideraban vejaciones leves. Una petición que fue rechazada y ahora se formaliza en un delito de agresión sexual.