El Partido Popular ha encontrado en Isabel Díaz Ayuso un fortín de cara a aglutinar votantes para las elecciones europeas del próximo 9 de junio. La presidenta de la Comunidad de Madrid lleva semanas endureciendo el tono contra las últimas decisiones tomadas desde el Gobierno de Pedro Sánchez en asuntos muy delicados de la política española.
El reconocimiento del estado de Palestina en plena guerra de Israel con Hamás, las críticas de determinados miembros del Ejecutivo al país israelí, la polémica con Javier Milei o la aprobación el pasado jueves de la Ley de Amnistía, que perdona todos los delitos a los políticos independentistas, son algunos de los asuntos donde Ayuso ha alzado la voz.
Solo esta semana, Ayuso ha concedido dos entrevistas a medios de comunicación donde ha arremetido contra el sanchismo. En la primera, en Telecinco, aseguró que Pedro Sánchez "está utilizando el conflicto de Israel para seguir haciendo la pinza con Vox y quitarle votos a Sumar". Del mismo modo, cargó contra su política internacional, una en la que "se están tomando decisiones unilaterales en cuestión de armas y ayudas".
Estas palabras recogían el eco creado por la propia Ayuso en la Asamblea de Madrid hace diez días cuando, para referirse a lo que supone para una democracia el terrorismo, se refirió al asunto con una frase del todo inadecuada, ponderando que "pretenden que las democracias hagan con Hamás lo mismo que con ETA. Tú mata, que yo te daré una comunidad autónoma. Tú mata, que yo te daré un Estado".
La posición de la presidenta con el conflicto ha sido siempre la misma, de absoluta desaprobación con el terrorismo llevado a cabo por Hamás y de reconocimiento al pueblo palestino, pero "no de la forma en que se está haciendo ahora".
Ayuso afianza el voto al PP
Su contundencia es un arma electoral que el Partido Popular no está dejando escapar con las europeas a la vuelta de la esquina. El mismo día que el Congreso dio luz verde a la amnistía, Ayuso se adelantó a Génova anunciando que Madrid, al igual que el resto de las Comunidades Autónomas gobernadas por el PP, presentarán un recurso de inconstitucionalidad contra la norma.
Una forma de ralentizar su puesta en marcha, al mismo tiempo que consigue aunar el descontento hacia Sánchez y el Gobierno de coalición. Ha tenido palabras hasta hacia Javier Milei, a quien defendió alegando que "nunca se le felicitó, se le puso de extrema derecha, loco y drogadicto", aplazando a un posible encuentro cuando regrese a España.
Hemos podido ver a la presidenta en diversos actos de campaña del PP para las europeas, el más sonado el pasado martes, coincidiendo con el primer aniversario de su mayoría absoluta. Allí cargó contra Sánchez y "sus mentiras".
"Cuando amagó con dimitir es porque sabía que su mujer había sido imputada", aseveró la máxima mandataria madrileña en el Parque Finca Liana. Sus palabras siempre están elegidas, tanto en tiempo como en forma, activando y movilizando a su electorado, uno múltiple que puede ser clave en las urnas del domingo que viene.
Pese a lo mostrado por las primeras encuestas, parece que al Partido Popular se le está haciendo larga la campaña electoral, tal y como le pasó en las elecciones generales del año pasado o en los comicios al parlamento gallego del mes de febrero.
La victoria parece, por lo menos, clara sobre el papel, pero con este nivel de crispación lo que se busca es una contundencia absoluta de los españoles contra el sanchismo. Por lo tanto, a los populares no les vale solo con ganar, debe de haber una diferencia que vuelva a poner al PP en el camino del constitucionalismo.
Max P. Palla
Esta mujer, que en general es bastante lúcida, tiene una ceguera irritante con Hamás e Israel: Hace 20 años estaría insultando a Nelson Mandela y bramando contra su ANC y elogiando la democracia sudafricana. Pro favor, que alguien le explique que Israel es el proyecto colonial de unos protonazis europoes ajenos a Palestina, que lla detestaría, que decidieron hacerse un estado allí, se lo construyeron a base de limpieza étnica y genocidio y se dedican a imponer el apartheid y a masacrar a la poblacion originaria.