Una violación por el método del mataleón. Así fue la brutal agresión sexual que sufrió un ciudadano chino a manos de su compañero de celda en la cárcel de Valdemoro en Madrid. Tres años después de este suceso, la Audiencia Provincial de Madrid ha condenado al responsable a seis años de prisión y también a la Secretaria General de Instituciones Penitenciarias al pago de más de 40.000 euros en concepto de responsabilidad civil subsidiaria.
La violación en la cárcel madrileña se remonta al 21 de septiembre de 2019 a las 22 horas cuando ambos internos se encontraban en su celda. Según la sentencia, fechada el pasado 11 de julio de 2023, a la que ha tenido acceso Vozpópuli, el agresor, de nacionalidad española de 30 años, abordó a la víctima "con ánimo libidinoso y sin su consentimiento, le cogió del cuello, le tumbó en la litera de abajo y le inmovilizó con los brazos sobre su pecho".
"Abriendo un sobre de lubricante con la boca se lo puso en una de las manos e introdujo varios dedos en su ano y luego el pene en su zona anal", según los hechos probados dictados por la Audiencia Provincial de Madrid. A consecuencia de estos hechos, la víctima, un hombre chino de 50 años, sufrió "hematomas digitales en ambos tríceps y ambos glúteos y un edema intenso en la zona anal".
"Se ha caído de la cama"
No se quedó ahí la violación. Un día después, a las tres de la tarde, mientras ambos se encontraban en el interior de su celda en la cárcel, continuaron las agresiones sexuales. El ahora condenado, dada la negativa de la víctima, le propinó puñetazos en la cabeza, golpes contra la pared y patadas en las piernas.
Ambos se encontraban juntos desde hace quince días en la celda número 47 del módulo seis y la víctima ni hablaba ni entendía el español. En un primer momento, el agresor explicó que su compañero se había caído de forma accidental de la cama y así se había provocado las lesiones que le llevaron a la enfermería. Cuando fue asistido por los médicos, con la ayuda de un intérprete, los trabajadores conocieron toda la verdad de la violación. El primer día que la sufrió no la denunció porque tenía miedo a su compañero de celda en la cárcel.
La cárcel incumplió su régimen
"El Centro Penitenciario de Valdemoro incumplió el régimen celular individual, autorizando un funcionario de servicio del centro penitenciario la solicitud del procesado y la víctima de compartir celda, sin recabar su consentimiento mediante intérprete y careciendo de competencias para ello", según los magistrados de la Sección número 2.
La sentencia dicta una condena de seis años de prisión para el violador de la cárcel pero el abogado de la víctima, Alfredo Arrién Paredes, del despacho Paredes y Asociados Abogados, tuvo que luchar el concepto de responsabilidad civil ante la negativa a ser asumido por parte de la administración.
Un largo historial de antecedentes
Finalmente, la Audiencia Provincial ordenó que este importe fuera asumido por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior y el Centro Penitenciario de Valdemoro. El ciudadano chino tendrá que recibir la indemnización de 5.000 euros por los daños morales, 2.175 por las lesiones ocasionadas y 37.759,83 euros por las secuelas originadas. El agresor tampoco podrá comunicarse con la víctima o aproximarse a una distancia inferior a 1.000 metros de su domicilio.
El violador de la cárcel contaba con un gran número de antecedentes, por lo que se encontraba en prisión. Con anterioridad había cometido robos con fuerza, robo con violencia, violencia doméstica, hurto, quebrantamiento de condena, atentado y lesiones. La víctima se encontraba en Valdemoro por una condena por estafa. No se descarta que la violación tuviera como su epicentro una venganza por los delitos del hombre de nacionalidad china.
La víctima ya se encuentra en libertad, mientras que el agresor en la actualidad sigue interno en el Centro Penitenciaria de A Lama (Pontevedra). Esta nueva condena amplía un historial delictivo que abarca casi todas las casillas del Código Penal.