La policía que vigilará este sábado las Marchas por la Dignidad, que confluyen en Madrid desde las carreteras nacionales, no quiere que los manifestantes se desvíen a la sede del PP en la calle Génova y vigilarán especialmente que no se inicien acampadas en el Paseo de Recoletos u otras calles de la ciudad.
Las marchas se han organizado desde grupos de izquierdas y está previsto que confluyan todas en Atocha, donde comenzará una manifestación que llegará hasta la Plaza de Colón. El objetivo de la convocatoria es exigir el empleo digno, la renta básica, los derechos sociales y las libertades democráticas.
El grupo más numeroso es el que llega desde Andalucía en el que han viajado unas ochocientas personas, mientras que el resto de columnas ha tenido menos afluencia.
Desde las redes sociales se está fomentando que después de la marcha se monte algún campamento como el que organizó en el 15-M en Recoletos o la Puerta del Sol.
Además de la manifestación de Atocha a Colón, convocada desde desde las cinco de la tarde hasta las nueve de la noche del sábado, está prevista una manifestación de ferroviarios de Galicia y Asturias y otras protestas en la Cuesta de Moyano y Lavapiés.
La policía cree que no habrá problemas con la marcha, pero sí se temen incidentes después de que termine la protesta oficial. Hay precaución y habrá vigilancia a los movimientos posteriores de grupos cercanos a la Coordinadora del 25M, Acampañada Sol o Izquierda Castellana o sus juventudes, llamadas Yesca.
