La remodelación ministerial que hará el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tras la designación del titular de Agricultura, Miguel Arias Cañete, como candidato a las elecciones europeas, será de carácter limitado, reducida a esta cartera. Sin embargo, no por ello se presenta como una operación tranquila, ya que la lucha por ocupar un asiento en el Consejo de Ministros permanecerá abierta durante toda la Semana Santa.
Desde hace semanas cargos del PP andaluz vienen presionando para que su presidente de honor, Javier Arenas, entre en La Moncloa, cubriendo así la baja que supone en la cuota andaluza de ministros la salida de Arias Cañete. Pero se prevé difícil, sobre todo, porque la persona que susurra al oído de Rajoy, su número dos en el Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, tiene otro nombre encima de su mesa: Federico Ramos de Armas, actual secretario de Estado de Medio Ambiente.
Ramos, licenciado en Derecho y Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Pontificia Comillas, pertenece a la promoción del cuerpo de Abogados del Estado de 2001, dos años después de la que formó parte la vicepresidenta del Gobierno. Integra así la amplia lista de abogados del Estado, próximos a Santamaría, que desempeñan puestos destacados en el segundo escalón del Gobierno.
Desde 2001 ha trabajado en la Administración General del Estado y en la Comunidad de Madrid, donde llegó a ser viceconsejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. También ejerció como abogado del Estado en la agencia estatal del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y ante la Audiencia Nacional, donde se encargó del macrojuicio de los atentados del 11-M.
La vicepresidenta, cuya relación con Arenas nunca ha sido de especial cercanía, ha marcado distancia con cualquier episodio que vinculaba al exministro con el 'caso Bárcenas'
Según informaron a Vozpópuli fuentes populares, el cese de Arias Cañete no se producirá en el Consejo de Ministros de mañana, ni a lo largo de la próxima semana, puesto que en ella no habrá reunión del órgano colegiado al coincidir con Viernes Santo. Así, con el calendario en la mano, el relevo del titular de Agricultura se efectuará probablemente el 25 de abril. Para ello, faltan todavía dos semanas en las que los movimientos internos para promocionar a un ministrable o a otro, desde las diferentes familias del PP, se repetirán con frecuencia.
Más allá de arrastrar su fracaso en conquistar la Junta de Andalucía en 2012 y su papel de mediador entre Génova y el extesorero popular Luis Bárcenas, el principal escollo que ahora se presenta a Arenas para volver a ser ministro, coinciden fuentes próximas del PP, es la opción que maneja la vicepresidenta, "la menos traumática", la del número dos de Cañete en el ministerio.
La relación entre Sáenz de Santamaría y Arenas, pese que ambos coincidieron recientemente en la figura de Juan Manuel Moreno para liderar el PP andaluz, no se ha caracterizado por una especial cercanía. De hecho, la vicepresidenta ha marcado distancia con cualquier episodio que vinculaba a Arenas con el caso Bárcenas.
Asimismo, un hipotético desembarco de Arenas en el Gobierno le otorgaría mayor omnipresencia que la vicepresidenta, ministra de la Presidencia y portavoz del Gobierno. Sería un dirigente con voz y voto en Génova, donde ya integra el comité de dirección como vicesecratario general de Política Autonómica y Local, y al mismo tiempo en el Consejo de Ministros. Ni Santamaría ni la actual secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que es quien ejerce de nexo principal entre el partido y el jefe del Ejecutivo, consentirían tal posición privilegiada de Arenas.
García Tejerina, "muy capaz"
El propio Arias Cañete ha influido en que su relevo no se produzca de inmediato. Las fuentes consultadas afirman que ha pedido poder permanecer en el ministerio algunos días más, tras ser presentado el próximo sábado como cabeza de cartel a las europeas, para dejarse las tareas hechas y facilitar el traspaso de la cartera. Un tiempo en el que también cobrará fuerza como ministrable su preferida, la secretaria general de Agricultura y Alimentación, Isabel García Tejerina, a la que ha definido como "muy capaz" para relevarle.
Licenciada en Derecho y con un máster en Economía Agraria por la Universidad de Davis (California), Tejerina fue directora de Planificación Estratégica en Fertiberia y consejera de la compañía mercantil argelina de fertilizantes Fertial S.P.A. Ostentó el mismo puesto que ahora en el Ministerio entre 2000 y 2004.