La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha afirmado que las tensiones con Unidas Podemos en el Gobierno de coalición han sido más "de cara a la galería" que las realmente vividas y ha destacado, además, su "magnífica" relación con la vicepresidenta Yolanda Díaz.
Así lo ha manifestado Montero en una entrevista para Efe, en la que ha abordado la actualidad política de Andalucía de cara a un posible adelanto electoral, ya que el presidente andaluz, Juanma Moreno, medita convocar elecciones este mes para poner las urnas en junio, tras un "deshoje de la margarita" que ella ve "un puro cálculo electoral" de "cómo le cuadran las encuestas", algo que "desacredita a cualquier gobernante", ha considerado.
Al respecto ha advertido de que Moreno "quiere aparentar que él es la salvaguarda de la entrada de Vox" en la Junta de Andalucía, cuando es "todo lo contrario", ya que, como muestra el pacto de gobierno en Castilla y León, el PP "abre la puerta" a la ultraderecha. "Si se vota al PP, la ultraderecha entrará en las instituciones andaluzas, igual que si se vota a Vox; no se puede engañar a nadie", expone Montero.
La ministra no duda de que Moreno le abrirá la puerta de San Telmo a la extrema derecha, después de confesarse "alarmada" al oír a dirigentes del Partido Popular que la entrada de Vox en la Junta de Castilla y León había que "vivirla con normalidad", pese a que "es algo que no tiene comparativa con partidos homólogos al PP en otros lugares de Europa".
Montero cree que Vox aspira a entrar en las instituciones "para desde dentro ser capaces de revertir el orden democrático".
Entrada "sin cartera"
Y de su entrada en el Gobierno de Castilla y León ha destacado que la vicepresidencia será "sin cartera". "Significa que a Vox lo que le interesa es ideológicamente revertir los discursos, ser capaces de avanzar en términos de nuevos conceptos, que son muy antiguos", como la violencia intrafamiliar intentando contraponerla a la específica contra la mujer o las leyes de concordia frente a las de memoria democrática.
El pacto en Valladolid hizo que "todas las miradas" fueran hacia el nuevo presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, porque, a juicio de Montero, "por supuesto que podía haber frenado o disuadido" ese acuerdo "si realmente tiene mando en plaza dentro del PP y no es un líder títere".
"Feijóo ha estado más preocupado por que no pareciera lo que era que por realmente frenarlo", opina la ministra, quien cree que si lo ha permitido, es porque "sabe que en este momento su capacidad de llegar a gobiernos viene de la mano de Vox".
Acuerdos con el Gobierno
Montero también teme que Feijóo puede evitar acuerdos con el Gobierno mediante pretextos "que no responden a la realidad", como evidenció tras su reunión en la Moncloa con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pese a ser un encuentro "cordial" y que espera que sea el principio de un PP que "reconozca la legitimidad" del Ejecutivo y deje de "seguir el juego a la ultraderecha en el caldo de cultivo de la antipolítica".
A su juicio, el ejemplo para ese temor mediante "enunciados o postulados que no responden a la realidad" es que Feijóo ha incidido en pedir una reducción del IRPF con el "olvido" de que el Gobierno en octubre ya aprobó una deducción de ese impuesto para la rehabilitación de viviendas con mejora energética.
También ha pedido a Feijóo que "se aplique sus propias recetas" respecto a su argumento de que tendría que gobernar siempre la fuerza política más votada, ya que el PP no se lo permitió al PSOE en varias comunidades autónomas en 2019.
Elecciones en Andalucía
De cara a unas futuras elecciones en Andalucía, Montero estará "absolutamente a disposición" del líder socialista andaluz, Juan Espadas, para participar "muy en primera persona" en la campaña y recuerda que como ministra ha tenido siempre "la mirada sobre Andalucía" y que en los últimos cuatro años la región ha recibido el 35 % más de recursos desde el Gobierno que en los cuatro anteriores con el PP en la Moncloa.
En ese sentido, la ministra sevillana acusa a Juanma Moreno de usar una política de "confrontación y victimismo" respecto a su Gobierno, mediante un supuesto "agravio" inexistente que ha llevado a "cuatro años perdidos", que no van a dejar "ni un solo proyecto emblemático o singular" para el progreso de Andalucía.
Por eso, espera que los ciudadanos andaluces en la campaña electoral "no se enfrenten a los eslóganes sino a qué ha hecho el señor Moreno Bonilla por Andalucía y qué ha hecho el Partido Socialista desde el Gobierno de España por Andalucía".
Montero desea que "cristalice" finalmente la coalición entre Podemos, IU, Más País, Equo y varios partidos andalucistas.
Incluso que "tenga un núcleo central", porque cree que "no puede consistir en una amalgama", para poder "capitalizar ese espacio a la izquierda del PSOE" y conseguir los "imprescindibles" votos para el "sector progresista" de quienes nunca van a votar a su partido y eludir que vayan a la abstención.
Lealtad en el gobierno de coalición
Del Gobierno de coalición con Unidas Podemos, ya en su tercer año, valora que ha conseguido "dar estabilidad" al país y que el balance es "muy positivo".
"Ambas formaciones hemos sido leales", ha subrayado la titular de Hacienda y Función Pública, quien tiene "particularmente una magnífica relación con la vicepresidenta" segunda, Yolanda Díaz, y ha sostenido que las situaciones de tensión han podido ser "más cara a la galería" que las realmente vividas.
La "experiencia de éxito" de la coalición supondrá "un aval añadido" tanto para el PSOE como para Unidas Podemos en próximas elecciones, augura Montero.