Mansur, el novio de una concursante del conocido programa de 'La isla de las tentaciones', era uno de los pilotos contratados por los "narcos del cielo" para descargar toneladas de cocaína en Europa, según informan fuentes policiales a Vozpópuli. Este joven ha sido uno de los arrestados por la Policía Nacional en el marco de la 'Operación Nkono-Porto' que ha conseguido desmantelar a una de las organizaciones criminales más poderosas en el tráfico de sustancias estupefacientes.
Mansur Mohamed Ben Barka Heredia, que también es hermanastro de Pepe Herrero, uno de los ganadores de Gran Hermano, ya contaba con antecedentes por narcotráfico. Fue identificado en 2021 como el propietario de 580 kilos de cocaína incautados en febrero de ese año en un avión de una empresa portuguesa en el aeropuerto internacional de Salvador. La prensa portuguesa señaló a este sujeto que cuenta con nacionalidad española, según estas mismas fuentes.
No fue la única vez que se vio en problemas con la justicia la pareja de Maika Rivera. La Policía Judicial Portuguesa tenía el foco en este individuo desde hace años. Una de sus mayores polémicas es que su avión, donde trasladaba a conocidos futbolistas, fue interceptado con cocaína en el fuselaje.
Los agentes llegaron a interceptar su vehículo porque sospechaban que la carga de la sustancia estupefaciente era suya y pensaba trasladarla fuera del radar de las autoridades. Ahora, más de tres años después ha sido detenido en el marco de esta operación de la Policía Nacional, que ha sido impulsada por el Juzgado de Instrucción número 2 de Alcobendas.
Una "oficina" en una cafetería de La Moraleja
Una cafetería en el exclusivo barrio de La Moraleja (Madrid) era la "oficina" de la organización criminal de los "narcos del cielo". Una banda que pretendía introducir toneladas de cocaína en Europa por vía aérea. La Policía Nacional ha detenido a 19 miembros de esta banda en España, otros seis fueron arrestados en Portugal, en un ambicioso dispositivo en el que han participado agentes de Madrid, Barcelona, Bilbao, Cuenca y Plasencia (Cáceres).
Las cifras de la 'Operación Nkono-Porto' son espectaculares y solo comparables a las del mayor alijo incautado en un contenedor en Algeciras. Los agentes de la UDYCO Central han intervenido 460 kilos de cocaína, un arma corta, más de 500.000 euros en efectivo, 18 vehículos y 45 terminales móviles -la mayor parte de ellos encriptados-; también se han bloqueado 8 inmuebles valorados en más de 1.650.000 euros y 80 cuentas bancarias con un saldo de 660.000 euros.
Los contratiempos sufridos obligaron a los investigados a buscar nuevas fuentes de financiación que les permitieran sufragar sus gastos del día a día, así como el pago de la sustancia estupefaciente y demás gastos de logística. Fruto de las gestiones policiales practicadas, los agentes detectaron varias vías con las que daban cobertura al aparato logístico y financiero de la organización.
Entre ellas, acreditaron la utilización de establecimientos que operan con criptomonedas para la conversión del efectivo resultante de las operaciones de narcotráfico en divisa legal. Asimismo, evidenciaron que recurrían a locales de envío de remesas de dinero y, como fuente principal, el contacto con empresarios de origen chino que contaban con capacidad económica suficiente y con una estructura que operaba a nivel mundial para realizar compensaciones de créditos al margen del sistema financiero legal (sistema denominado Hawala).