El lehendakari Iñigo Urkullu considera que el actual momento político "abre una nueva oportunidad" para avanzar en el carácter plurinacional del Estado y en el desarrollo del autogobierno de País Vasco, "y en su caso Navarra y resto de comunidades históricas" sin necesidad de modificar la Constitución.
En una tribuna publicada en 'El País' este jueves, Urkullu, que este miércoles mantuvo una conversación telefónica con el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, en el marco de la ronda de contactos para los apoyos a la investidura, propone una "convención constitucional", algo que ya hizo en el año 2018, que permita pactar "una interpretación de la Constitución sobre aquello que no ha resuelto": la cuestión territorial", y sin que haya modificación previa de la Carta Magna.
Urukullu explica que la figura de la "convención constitucional" es un recurso utilizado en la cultura política anglosajona y para su aplicación en España "no habría impedimento expreso".
Se trataría, dice, de una convención constitucional "limitada o específica" para actualizar la interpretación de la Constitución sobre la cuestión territorial. "No sería una fórmula mágica ni un camino expedito, pero podría abrir nuevas posibilidad de desarrollo futuro", subraya.
No queremos imponer nada a nadie, pero tampoco podemos aceptar que se impida al pueblo vasco manifestar su voluntad", dice Urkullu.
En opinión del lehendakari, esta iniciativa "novedosa y viable" plantea un doble pacto: un acuerdo de bases para la convocatoria y desarrollo de la convención sobre el autogobierno incluyendo principios como el cumplimiento íntegro de los marcos estatutarios y la bilateralidad y celebrar una convención en el plazo de un año para "analizar el alcance actual y futuro de la disposición adicional primera de la Constitución, el autogobierno de las comunidades de raíz foral e incluso el de las nacionalidades históricas".
Urkullu insta a permitir decidir al pueblo vasco
Urkullu entiende que ahora se abre la posibilidad de "evolucionar progresivamente" si bien es consciente de que el pacto "no se puede imponer al Estado".
"Las dos partes deben estar de acuerdo y han de actuar con un compromiso de lealtad recíproca. No queremos imponer nada a nadie, pero tampoco podemos aceptar que se impida al pueblo vasco manifestar su voluntad", admite en el artículo.
Tony010
Lo de éstos es alucinante, lo malo es que Feijoo piensa igual en su terra galega. Todos estos caciquillos feudales, de flequillo corto, mente y frente estrechas y pelo corte tazón de desayuno se creen que el resto de los españoles se van a quedar con los brazos cruzados frente al descuartizamiento de la Nación, y se han olvidado de cuántos vascos, galegos y catalanes cantaban el Cara al Sol en 1939. Se han olvidado por completo.
parlando
País Vasco y Cataluña: territorios donde el carlismo no fue vencido - sobre todo en el mundo rural. Viven en su mundo de fantasías. "España plurinacional". Y mientras discuten, ¿a cuánto el metro cuadrado de vivienda en alquiler? ¿Quiénes siguen comprando inmuebles - si pueden? ¿La clase media? Agitando trapidos de distracción la clase política española no tiene igual. "Hasta las narices y más allá".
Wesly
Urkullu hablando de "compromiso de lealtad". Resultaria cómico, patético, penoso, si no fuera porque demasiadas mentes débiles se tragan estos discursos que nos conducen a la desigualdad, a la injusticia, a la arbitrariedad.