La Gran Vía de Madrid ha amanecido repleto de mensajes que proclaman que para los patinetes 'Aparcar es una movida'. El autor es Lime, una compañía de patinetes, que pide al Ayuntamiento de Madrid que habilite zonas de aparcamiento para patinetes y cumpla de esta forma la nueva normativa de movilidad. El objetivo es lograr que la presencia de estos vehículos no interfieran con el normal tránsito de los peatones.
Esto último ha sido una queja habitual entre los vecinos y transeúntes del centro de la ciudad, que han visto como las zonas para peatones han sido invadidas por los patinetes. El problema debería haber quedado resuelto con la normativa de movilidad que se implantó el pasado septiembre, que aseguraba puntos de estacionamiento para patinetes, pero estos todavía no existen o no están ideados para patinetes. Por eso, la empresa quiere establecer una colaboración con el Ayuntamiento de Madrid para construirlos lo antes posible.
Los que ya existen "están destinados mayoritariamente para motos, dificultando el estacionamiento de patinetes". Así lo señalan desde la compañía, a través de Arnau Pérez Valero, responsable de asuntos públicos de Lime. Añaden que "la aprobación de la normativa demuestra el compromiso del Ayuntamiento por la movilidad sostenible y de impulsar nuevas fórmulas de movilidad”.
De hecho, con esta acción, Lime y el resto del sector quieren tender su mano al Ayuntamiento para instalar estos puntos. Le han ofrecido al Ayuntamiento -y lo vuelven a hacer con esta propuesta- hacerse cargo de los costes o realizar una aportación económica para lograrlo. "Queremos reiterar el ofrecimiento del sector para contribuir a la financiación de estos puntos de estacionamiento establecidos en la nueva Ordenanza”, afirman en su comunicado. Necesitan más espacios, ya que hay más patinetes que aparcamientos específicos y esto produce que muchos de ellos se aparquen en las aceras.
También piden colaboración al Ayuntamiento de Madrid a través de SmartMobility, que integra a las principales compañías de movilidad. Lo han hecho en una carta a Borja Carabante, responsable de movilidad en el Ayuntamiento de Madrid. Estas empresas quieren que se instalen estos puntos par que después se les notifique su ubicación para que "puedan integrarlos en sus respectivas aplicaciones y contribuir a una mejor ordenación de la ciudad”.
Pese a que se puede aparcar en las aceras cumpliendo ciertas condiciones que desde la compañía no pueden comprobar si se cumple o no, Lime desde hoy es la única compañía que exige a sus usuarios aparcar en las zonas delimitadas para ello. Lo que quieren evitar es precisamente la "elevada cantidad de multas" que están recibiendo como consecuencia del mal estacionamiento de los usuarios.
